Test | Mercedes-Benz EQB

Mercedes-Benz EQB: un adelantado a su tiempo

Este SUV sería el coche ideal para los viajes familiares, pero la infraestructura eléctrica lo enjaula en la ciudad

Mercedes-Benz EQB

Mercedes-Benz EQB / L.O.

Telva Somoza

Tras la prueba de un coche como el Mercedes-Benz EQB 300 4MATIC de 7 plazas, que resalta por su confort de rodadura y prestaciones, nos reafirmamos en la posición del trabajo hecho por parte de los fabricantes. Es un eléctrico práctico para viajar en familia, pero la infraestructura lo convierte en un pájaro enjaulado en la rutina diaria. 

Este Mercedes EQB es uno de los todocaminos eléctricos con más autonomía del mercado, 409 kilómetros homologados en ciclo WLTP y un consumo de 18,7 kWh. Es un SUV grande, de 4,68 metros de largo por 1,83 m de ancho y 1,67 m de alto, por lo que tiene una distancia entre ejes de 2,82 metros y una habitabilidad ideal para familias numerosas.

Dos años después, los concesionarios están esperando la llegada de un pequeño restyling centrado en la parte estética. El modelo probado forma parte de la hornada anterior, pero nos sirve para hablar de lo realmente importante: ¿Es un coche recomendable para una familia numerosa?

Espacioso y confortable

El EQB cumple con los dos atributos más importantes para ser un vehículo familiar, pero con la dotación prestacional que ofrece la propulsión eléctrica. El 300 4MATIC son 228 CV de potencia y 390 Nm de par “casi” instantáneo, por lo que se mueve bastante bien pese a las más de dos toneladas de peso. La tracción total es ciertamente responsable de su buen aplomo y ciertas capacidades off-road gracias a los 14 centímetros de altura respecto al suelo.

No creemos que el propietario de este EQB se dedique a descubrir lugares inhóspitos, pero sí podrá recorrer una pista sin asfaltar de camino a su casa de campo. Un hogar en el que, por su bien, deberá instalar un punto de carga de 7,4 kW para completar la batería en poco más de diez horas. De hacerlo en una toma doméstica de 3,7 kW necesitará cerca de 19 horas y son 6,5 horas las necesarias para una corriente alterna de 11 kW. La corriente máxima admitida por su batería de 66,5 kWh es de 100 kW, que completa el 0 a 80% en 32 minutos.

¿Para viajar?

Es la misma duda que respondió mi compañero durante su prueba del modelo 350 4MATIC y la respuesta, lamentablemente, sigue siendo la misma. Su experiencia durante un viaje Madrid-Valencia, en el que la autonomía se redujo a poco más de 300 kilómetros, nos dejó con la duda: ¿Es entonces un coche para la ciudad? Por su propulsión sí, pero su tamaño complica la existencia pese a la infinidad de ayudas a la conducción, avisos y sistemas como las cámaras perimetrales del Mercedes EQB.

Por suerte, su conducción es ágil, relajada y silenciosa para nuestro día a día. Además, es posible ver más de 409 kilómetros de autonomía si pensamos en la eficiencia, aceleramos con calma y aprovechamos al máximo la frenada regenerativa o activamos su modo automático.

¿Quién debería comprarse un Mercedes-Benz EQB? Una familia que requiere de un buen maletero (465 litros) o necesita, de manera esporádica, de las siete plazas para trayectos interurbanos de acceso a las grandes ciudades, que podrá realizar a través de su carril BUS/VAO. Urbes que limitarán su tráfico a los vehículos cero emisiones. Además, el ahorro en caso de contar con cargador en casa es sustancial y clave para justificar la compra desde 61.063 euros para el 300 4MATIC o 64.508 euros para el 350 4MATIC de siete plazas.