Mazda celebra sus 100 años de historia lanzando su primer vehículo 100 % eléctrico, el Mazda MX-30. Se toma la plataforma del modelo Mazda CX-30, por eso sus dimensiones son muy parecidas: 4,40 metros de longitud, 1,80 metros de ancho y una altura ligeramente superior -1,57 metros-. Estas medidas le permiten pisar la ciudad con mucha solvencia y también ofrecer una habitabilidad suficiente en trayectos de extrarradio.
Su carrocería de cinco puertas tiene la particularidad de que los accesos traseros se abren enfrentados al sentido de la marcha, una solución que la firma ya aplicó en su deportivo Mazda RX-8. Esta configuración deja paso al interior más fácilmente, ya que no existe el pilar central -va incluido en los perfiles de las puertas traseras-, aunque hay que abrir siempre las delanteras antes de hacer lo mismo con las de atrás.
Homologado para cinco plazas, la caída del techo hacia la zaga no condiciona demasiado la cota de altura en los asientos traseros, además los ocupantes de esa parte del coche pueden meter los pies bajo las plazas de delante, por lo que se asegura una habitabilidad suficiente ahí. El maletero está en la media de su categoría con los 366 litros, ya que debajo hay dispositivos de gestión de la recarga.
Plásticos muy bien tratados
Por otro lado, en el puesto de conducción apreciamos plásticos muy bien tratados -de lo mejor que hemos visto en la marca-, tapicería de cuero sintético muy agradable -muchos fabricantes están empleando este tipo de acabado 'vegano'- y unas curiosas inserciones de corcho muy vistoso.
La elección de este material evoca el centenario de la firma, pues en su nacimiento se dedicó a manufacturar derivados de esta materia prima, además de crear una imagen de vehículo más sostenible que se confirma con más elementos reciclados, como los montantes de las puertas fabricados con botellas de agua de PET.
La instrumentación se visualiza en una pantalla de 7 pulgadas completada con indicadores de aguja a cada lado. La información mostrada es atractiva y legible, igual que el sistema 'Head Up Display' de gráficos reflejados en el parabrisas.
Hay otra pantalla central para el equipo multimedia de 8,8 pulgadas de formato alargado. No es táctil, pero se maneja cómodamente a través de los mandos situados entre los dos asientos.Otra novedad en la marca es la pantalla destinada a la climatización, que forma parte de una consola flotante en dos alturas -la ausencia de transmisión física ha permitido este diseño-.
Mecánica avanzada y efectiva
El propulsor eléctrico tiene una potencia de 143 CV y se encuentra bajo el vano delantero para dar fuerza a ese eje. El paquete de baterías, firmado por Panasonic, se instala en la parte central inferior de la carrocería, lo que mejora el reparto de pesos y baja el centro de gravedad.
Sus celdas de iones de Litio tienen una capacidad total bruta de 35,5 kWh, proporcionando así una autonomía de 200 kilómetros en ciclo WLTP, suficientes para el uso al que está enfocado el vehículo. Cabe decir que el año próximo estará lista una versión con rango extendido gracias a la adopción de un motor de gasolina auxiliar, de tipo rotativo, que se encargará de recargar los acumuladores -no para mover el coche-.
El Mazda MX-30 se recarga a un máximo de 6,6 kWh en una toma de corriente alterna o hasta 50 kWh en un cargador rápido de corriente continua, con tiempos de espera de unas cuatro horas o media hora, respectivamente. Con la promoción puntual de lanzamiento, el cliente obtiene gratis un cargador de tipo Wallbox de 7,4 kWh, aunque la instalación corre por su cuenta. Además, hay un acuerdo con Iberdrola para una tarifa de consumo especial con un interesante descuento.
Al volante, el nuevo MX-30 resulta un vehículo cómodo al extremo. Un sonido simulado del motor -que no es nada molesto-, ayuda a mantener la sensación de velocidad y control propios de un coche de motor térmico.
Ágil y divertido, el bajo centro de gravedad ayuda a un aplomo sobresaliente. Unas reacciones apadrinadas por el sistema G-Vectoring Control Plus, que maximiza el confort a bordo y la motricidad. Hay más asistentes al manejo, como el frenado inteligente -detecta otros vehículos en caso de que el conductor no se percate, por ejemplo en una intersección-, el mantenimiento de carril incluso sin líneas en la carretera o la frenada de emergencia con detección de peatones. Las ópticas son de Led adaptativas.
Coherencia eléctrica
El MX-30 es el primer Mazda 100 % eléctrico y, como todos los modelos en los que este fabricante emplea la denominación MX, se trata de un coche ‘especial’ -como el ya mítico Mazda MX-5 o aquel agresivo Mazda MX-3 que montaba el motor V6 más pequeño del mundo- y, lo cierto es que lo es. Y, no solo por sus puertas traseras, que se abren hacia atrás -como las del extinto Mazda RX-8 o las de un BMW i3-, sino por su peculiar silueta SUV Coupé o, más aún, por lo razonable de su planteamiento y porque, aun siendo un 100 % eléctrico, ni lo parece -tiene calandra delantera y huye del futurista planteamiento estético de la mayoría de los eléctricos del mercado-, ni es tan distinto de manejar del modelo de combustión interna del que se deriva, el Mazda CX-30. A priori, 143 CV y 200 km de autonomía homologada según la norma WLTP, gracias a su batería de 35,5 kWh, no son cifras para presumir, pues muchos de sus rivales las superan, pero en realidad tienen mucho sentido.
Cuanto mayor sea la batería, más se tarda en cargar, más pesa y, sobre todo, es mucho más cara. Este MX-30 se carga, con corriente alterna -la que tenemos en casa- a un máximo de 6,6 kW y con continua -la de los escasísimos cargadores rápidos- a un máximo de 50 kW. En el primer caso necesita unas cuatro horas para cargar entre el 20 y el 80% de sus baterías, mientras que en el segundo le basta con 30 minutos. Estas cifras le hacen viable y utilizable a diario con el lamentable panorama de puntos de carga que tenemos en nuestra ciudad y en nuestro país. No está concebido para largos viajes, sino para un uso urbano y extraurbano, podemos usarlo a diario -raro será que hagamos más de 200 kilómetros- e incluso marcharnos de fin de semana a la playa, sin miedo. Eso es lo importante y, lo que Mazda busca y ofrece.
Por lo que respecta a su conducción debemos decir que es tan brillante, como la de cualquier otro modelo de la marca. Suave en extremo, responde con la típica inmediatez de los eléctricos, pero sin tanto ímpetu, de una forma mucho más progresiva y agradable. Alcanza rápido sus 140 km/h de velocidad punta y los frenos tienen un tacto excelente y mucho más próximos a los que emplean los modelos de combustión interna a los que estamos acostumbrados -en la mayoría de los eléctricos 100 % son duros y poco dosificables-.
Además y gracias a las levas que hay tras el volante, podemos regular los 5 niveles de retención del motor. Dinámicamente y debido a las ayudas electrónicas a la conducción, éste MX-30 es fácil de conducir, ágil e incluso divertido. Si a todo esto sumamos la excelente calidad de ajustes y materiales, lo vanguardista de su diseño y su excelente ergonomía interior, obtenemos un coche francamente recomendable.
Precio del Nuevo Mazda MX-30
Se han previsto cuatro niveles de equipamiento, con un buen número de elementos desde el acceso: Origin, 1st Edition, Evolution y Zenith. El precio de partida es de 30.875 euros, incluyendo el plan MOVES II para la ayuda a la compra de vehículos eléctricos. Puedes encontrarlo en Mazda Levauto Murcia.
Mazda Levauto Murcia
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