Renovado a finales del pasado año, el Kia Carens ha ganado vigencia gracias a los nuevos detalles estéticos del frontal, donde cambia la parrilla, los antinieblas y el paragolpes; la zaga incluye nuevos pilotos y otra defensa y el perfil ahora puede contar con llantas de 16, 17 y 18 pulgadas. Dentro se actualiza la tapicería, que puede ser de piel, y aparecen varios elementos de acabado metálico y negro brillante, además del salpicadero con un efecto de ´fibra de carbono´.

Los nuevos elementos de dotación añaden un equipo multimedia con pantalla de 7 pulgadas, que da acceso a varios servicios del entorno TomTom (posibles radares, incidencias de tráfico, localización de puntos de interés o información meteorológica) y que se completa con las últimas posibilidades en materia de conectividad (Apple CarPlay y Android Auto) y cámara de visión trasera.

Mecánicas

El Kia Carens se vende con dos mecánicas de gasóleo (1.7 CRDi de 115 y 141 CV) y una de gasolina (1.6 GDi de 135 CV). Las cajas de cambios son manuales de seis relaciones en los tres motores, aunque el más potente se puede asociar a una caja automática de doble embrague DCT de siete relaciones. Nosotros hemos tenido la oportunidad de probar una unidad con el motor de acceso, que es el diésel de 115 CV, una opción a la que se le puede añadir un interesante paquete ´Eco´ que le permite ahorrar algo de combustible gracias a unos neumáticos de menor resistencia a la rodadura, el sistema de arranque y parada del motor y unas relaciones de la caja de cambios revisadas.

Interior práctico

Quien demande un vehículo de amplio interior pero no muy aparatoso en tamaño, el Kia Carens le puede encajar perfectamente. Además se puede configurar con siete plazas por 700 euros, lo cual resulta una ventaja si tenemos que montar más gente en alguna situación puntual. Sus 4,52 metros de longitud, le permiten mucho espacio en la fila central, la cual va separada en tres plazas, que se pueden desplazar longitudinalmente 30 centímetros y de forma individual. Así dejan más maletero con los asientos de la tercera fila plegados o bien facilitan el acceso a éstos si están en uso. Así, la capacidad de carga del Carens puede pasar desde los 103 litros de maletero con siete ocupantes, hasta un mínimo de 500 litros con cinco (unos 1.700 litros solo con la fila delantera). Asimismo es destacable la facilidad con la que se pliegan los asientos de la tercera bancada, pues apenas sin esfuerzo se quedan sus dos plazas guardadas formando un espacio de carga plano.

Delante, el conductor se sienta en una postura elevada y dispone de buena visibilidad hacia todos los ángulos debido a la gran superficie acristalada del vehículo. La calidad percibida aumenta su empaque (plásticos blandos en las zonas más expuestas, bien encajados, diseño vistoso...) y nos ha dado la impresión de ser muy cómodo para viajes largos.

En marcha

Para este tipo de monovolumenes, en los que se puede cargar bastante gracias a su gran maletero, y encima transportar hasta siete personas (mejor si los dos de la tercera fila son niños o adultos de menor estatura), el motor resulta un tema mayor. No obstante, el bloque de 1,7 litros, en el nivel de 115 CV es muy voluntarioso y nos parece suficiente, siempre que usualmente no vayamos muy cargados o nos guste una conducción muy decidida. A cambio nos obsequia con mucha suavidad de marcha y, lo mejor, un consumo francamente bueno para esta carrocería ya de cierto porte y casi 1.600 kg, pues gasta una media de 4,6 litros por cada 100 km y emite 120 gr de CO2 ponderados por cada 100 km. Su dinámica es aplomada y la dirección, que puede regular su asistencia, mete bien al vehículo en las curvas, aunque no ofrece mucha información del tipo de firme que pisamos (esto puede ser una buena cualidad para algunos conductores). Ese buen aislamiento general se ve aumentado con las pocas vibraciones del motor, algo que contribuye a la comodidad de marcha y también por el acertado tarado de las suspensiones, que filtran muy bien las irregularidades del terreno.

Dotación

Kia pone por primera vez en el Carens los sistemas de asistencia a la conducción DRiVE WISE, que incluye el aviso de objetos en los ángulos muertos o la alerta de tráfico trasero cruzado, además del sistema de reconocimiento de señales.

El Carens de 7 plazas y con este motor diésel de 115 CV se configura a partir del acabado Concept (desde 17.198 euros), que incluye elementos como la guantera refrigerada, el sistema de audio con Bluetooth y conexiones auxiliares, las llantas de 16 pulgadas, las barras en el techo, las luces diurnas con Led, el alumbrado suplementario de esquinas, el climatizador y el control de velocidad, entre otros. Subiendo al nivel Drive (desde 19.198 euros) aparecen dispositivos como la navegación, los guarnecidos de piel sintética, las llantas de hasta 17 pulgadas y los sensores de lluvia y luces, por citar algunos.