El terremoto ocurrido esta mañana en Afganistán se sintió también en el norte de Pakistán y la India, donde causó el pánico entre los supervivientes del seísmo del pasado 8 de octubre, que acabó en esos países con la vida de cerca de 90.000 personas.

El seísmo, ocurrido esta madrugada a las 2.51 hora local (22.21 del domingo GMT), alcanzó los 6,7 grados de intensidad en la escala Ritcher y los temblores se sintieron en la provincia oriental del Punjab, Islamabad, Rawalpindi, Pesháwar, Muzzaffarabad, Mansehra, Balakot y Giglit.

Aunque por el momento no se ha informado de víctimas en Pakistán, el nuevo seísmo causó el pánico entre los damnificados de la catástrofe ocurrida hace dos meses en el norte país, en la que muchos perdieron a familiares y amigos, y miles de personas salieron de sus casas y pasaron varias horas en la calle, donde se registraban temperaturas bajo cero.

El terremoto también se sintió en el norte de la India y se pudo sentir en la región de Cachemira e incluso en la capital, Nueva Delhi, aunque tampoco en ese país se ha informado por el momento de que haya causado ninguna víctima.

Según el Instituto Geológico de Estados Unidos, que mide la actividad sismológica en todo el mundo, el seísmo estuvo centrado en la región del Hindu Kush, en el noreste de Afganistán, 95 kilómetros al sureste de la localidad afgana de Feyzabad y 95 kilómetros al noroeste de la ciudad paquistaní de Chitral.

Este organismo indica que la localización del epicentro es de 36,339 grados norte de latitud y 71,105 grados este de longitud, y que este tuvo una profundidad de 228,2 kilómetros.

Cerca de un millón de personas perdieron sus hogares en octubre por el terremoto de Pakistán y se ven obligadas a pasar el duro invierno himaláyico protegidas tan sólo con tiendas de campaña y ropas y mantas donadas por el Gobierno y organizaciones de ayuda humanitaria.

A pesar de que las tareas de socorro y reconstrucción se han visto muy dificultadas por el mal tiempo estas aún prosiguen y ayer, lunes, las autoridades paquistaníes afirmaron que habían rescatado viva a una mujer de cuarenta años que ha permanecido desde el pasado 8 de octubre bajo los escombros de su vivienda en la región paquistaní de Cachemira.