El euríbor ha registrado sus máximos históricos siempre en verano: ¿bajará a partir de septiembre?

El euríbor comenzó a utilizarse como índice de referencia para calcular los intereses de las hipotecas variables en Europa en el año 1999. Desde entonces, sus valores máximos registrados los ha anotado durante los meses de verano: en agosto del año 2000 se situó en el 5,248%, el segundo dato más alto de su historia y el primero lo anotó justo ocho años después, en julio de 2008, cuando se situó en un 5,393%, una cifra que, para alivio de los hipotecados, hasta ahora no se ha vuelto a superar.

Por el contrario, entre febrero y diciembre también ha anotado sus datos más bajos: en febrero de 2016, el euríbor registró el primer dato negativo de su historia y en enero de 2021, pese a que apenas un año antes el mundo estuviera en jaque por la pandemia del coronavirus, anotó su mínimo histórico (-0,505%), lo que ha marcado un antes y un después en el mercado hipotecario.

“Como norma general en los meses de verano se suelen enfriar las noticias económicas tanto positivas como negativas lo que suele hacer que el indicador se tome un respiro tras el mes de agosto. Los mercados y el Banco Central Europeo (BCE) también se 'van de vacaciones' por lo que la sensibilidad del indicador durante la época estival baja considerablemente”, explica el director de Hipotecas del comparador y asesor hipotecario iAhorro, Simone Colombelli. Respecto a sus datos mínimos, el portavoz del comparador agrega que “el final y principio de año es la época de más consumo en general y, por tanto, todos los actores financieros (bancos, instituciones…) intentan estar alineados para facilitar ese consumo”.

¿Qué está pasando ahora con el euríbor?

A pesar de que el euríbor ha estado casi 20 meses, desde enero de 2022, en ascenso, todavía no ha superado de nuevo la barrera del 5%. El pasado mes de julio de 2023 terminó en un 4,149% y, pese a que el Banco Central Europeo (BCE) ha seguido con su política de subida de tipos de interés situándolos en un 4,25%, el euríbor ha reducido su crecimiento. Tanto es así que este mes de agosto registra una cifra menor que la del mes pasado: 4,072% a falta de los datos de cinco días hábiles para cerrar el mes.

¿Podría el euríbor haber alcanzado un nuevo tope en julio? “Todo hace indicar que la situación se está estabilizando”, asegura Simone Colombelli, director de Hipotecas del comparador y asesor hipotecario iAhorro, que añade que “si el BCE no vuelve a subir tipos en septiembre (se reúne el día 14) será un aliciente más para que el índice de referencia se mantenga en torno al 4% unos meses, sin subidas ni bajadas drásticas al menos hasta que se controle la inflación de la eurozona”.

Septiembre, un punto de inflexión para los hipotecados

En 14 de los 24 años de vida del euríbor, septiembre ha sido un mes de bajadas en este indicador. La mayor caída del octavo al noveno mes del año la experimentó el índice de referencia en el año 2001, cuando pasó de registrar un valor del 4,108% en agosto al 3,770% de septiembre (-0,34 puntos porcentuales). En ese momento nos encontrábamos en plena recuperación de la crisis de las puntocom.

¿Es entonces septiembre el mejor mes para firmar una hipoteca? “El mes de septiembre marca el inicio de una buena época. No siempre es el mejor mes, pero tampoco es el peor. Normalmente, a partir de este mes, los bancos comienzan a hacer balance de cómo ha ido el año y meten un último empujón en el último trimestre para intentare 'salvar' los objetivos planteados”, responde Colombelli. Por este motivo y como el euríbor es muy sensible a la situación económica de Europa, si se cierra o se inicia el año con buenas sensaciones, este indicador también lo reflejará en sus datos.