Durante más de dos meses tuvo que escuchar José María Salmerón críticas cada vez que su UCAM completaba un partido de pretemporada y no ganaba. Solo un triunfo lograron los universitarios en ese período, generando dudas de puertas para afuera. Los fantasmas quedaron despejados en el momento que comenzó la liga. «Los que veíais problemas erais vosotros, nosotros sabíamos lo que buscábamos y las pruebas que estábamos realizando», decía el técnico almeriense hace unos días, señalando a los que cuestionaron al equipo en esa etapa veraniega. Le sirvió la pretemporada al UCAM para llegar a la competición con todos los detalles más que pulidos. Fue echar a rodar el balón de forma oficial y los de La Condomina no solo no han perdido un partido en liga, sino que además se han clasificado para la Copa del Rey tras superar tres rondas en Copa Federación. Quitando pequeñas modificaciones, la pizarra del almeriense no tiene borrones. Todo lo contrario ocurre en el Real Murcia. Tras dos meses de pretemporada, los granas han llegado a la competición como los estudiantes que se dejan los deberes para última hora. La imagen ofrecida por el equipo frente al Sevilla Atlético y al Lorca Deportiva solo ha generado nubarrones, y eso que ante los lorquinistas se sumaron los tres puntos gracias a dos acciones a balón parado. Pero detalles, lo que se dice detalles, no generan los de Adrián Hernández, que además asustan por la falta de conexión entre futbolistas con los que el técnico ha contado desde el inicio de pretemporada. Los bandazos con los sistemas en solo dos jornadas también dejan entrever que las dudas no solo están en el terreno de juego sino también en el banquillo.

Ocurrió frente al Sevilla Atlético en el debut en esta temporada y volvió a suceder el pasado domingo en el Artés Carrasco contra el Lorca Deportiva. Pese a una pretemporada larga y a tener dos semanas extras al no poder jugar por el coronavirus, Adrián Hernández sigue sin tener claro el sistema por el que apostar. Ha tenido que recurrir a la defensa de tres, que apenas había utilizado en los amistosos veraniegos, pero ni dio resultado ante los sevillistas ni en Lorca, donde tuvo que buscar una solución porque los de Iban Urbano destrozaron la retaguardia grana antes del descanso y al inicio de la segunda parte. También eliminó a las primeras de cambio la figura del mediapunta. Ejerció esa tarea sin éxito Pedrosa en el encuentro de Nueva Condomina. Ya en el Artés Carrasco, Abenza pasó a engordar el centro del campo, eliminándose una figura con la que tampoco se aclaró el técnico el pasado curso.

Ante la falta de futbolistas capaces de mover al equipo en el centro del campo, Adrián Hernández ha vuelto a recurrir a la defensa de tres, dando libertad por banda a los laterales. Lo probó durante unos minutos en el choque ante un Sevilla Atlético que estaba superando a jugadores como Youness y Yeray, llegando con facilidad al área de Tanis; y lo volvió a repetir en el Artés Carrasco. Si ya en el primer intento se vio que los carrileros traen más problemas que soluciones, al dejar vendidos a los centrales para lanzarse a un ataque donde no son resolutivos, en la segunda prueba, Iban Urbano subo leer perfectamente las deficiencias granas, para incidir por las bandas, llegando a generar un cortocircuito del que solo se salvaron los visitantes gracias a dos acciones a balón parado. Antonio Navas, que jugó por la derecha frente al Sevilla Atlético, ya fue suplente esta semana, dejando su puesto a un Sandoval que se encontró más descolocado que otra cosa. También ha quedado marcado Iván Pérez, aunque el murciano parece tener vidas ilimitadas en el once titular de los granas. Mientras que el ex del Levante era sustituido en el 58, Iván Pérez abandonó el césped en el 73.

Si hay una zona que ha salido reforzada este verano esa es la del centro del campo. Aunque el Murcia también ha mejorado mucho su defensa con la llegada de Álvaro Moreno, donde los granas deben dar un paso al frente es en el medio, con Yeray y Abenza. De momento, en los dos primeros partidos, el futbolista canario no ha sido importante en el juego. A medio gas, no ha podido imponerse en su zona. Youness incluso se ha dejado ver más que su compañero, que en Lorca sí demostró que puede ser determinante en las acciones a balón parado. Y es que los dos goles de Toril nacieron de sus botas. Solo dos detalles que apenas son suficientes si tenemos en cuenta que el del centrocampista es el fichaje más importante para esta temporada. Si Yeray ya ha sido titular en dos partidos, Abenza solo ha jugado el del Lorca Deportiva, y es que el primero se lo perdió al estar contagiado por coronavirus. El murciano, por el que el Murcia también hizo una apuesta importante, tampoco se hizo notar en el césped del Artés Carrasco, donde los granas, pese a jugar con tres centrocampista, solo tuvieron el control del partido en los instantes finales, cuando los de Iban Urbano ya habían agotado casi todas sus fuerzas.

No aparecen figuras importantes como el mencionado Yeray y Adrián Hernández tampoco el sistema ideal con el que el equipo se sienta cómodo teniendo el control y no sufra, pero el Real Murcia también echa en falta la ausencia de calidad en su plantilla. Nadie es capaz de tomar decisiones que rompan los partidos, ni de encontrar el camino para dar más opciones a dos delanteros como Chumbi y Toril, que están en racha en este inicio de temporada.