En lo que respecta a lo meramente deportivo, el gran protagonista era Manuel Sánchez Breis, que como confirmaba Belmonte, pasa a ser el máximo responsable de la parcela deportiva. Uno de los primeros pasos es decidir qué jugadores que han logrado el ascenso van a continuar en el equipo. Dos nombres propios que no tienen contrato porque llegaron cedidos, por los que se está peleando para que continúen. Otros, en cambio, ya saben que no van a seguir: «En los casos de William y Lucas de Vega, la temporada que han hecho es muy del agrado de todos y nos gustaría contar con ellos. Estamos viendo las opciones que tenemos de que se queden con nosotros y ojalá en unos días podamos decir que van a vestir nuestros colores. Hay otros jugadores a los que ya se les ha comunicado que no van a seguir», aseguraba. «Somos los últimos de la fila ahora mismo, pero es verdad que hay gente que valora mucho la manera de trabajar que hemos tenido hasta ahora. Nos está sorprendiendo que en cuanto a las cesiones haya equipos grandes que nos valoren porque han visto que hemos sacado jóvenes y que el míster los pone. Creo que eso va a ser un aspecto importante en la planificación de este año. Va a haber entradas y salidas, pero no hay muchas negociaciones cerradas. Hay dos o tres cosas avanzadas a falta de detalles y a partir de ahí los criterios serán los del perfil que buscamos: gente con hambre de seguir creciendo y jugadores del estilo que requiera el míster», afirmaba Belmonte.