Al contrario que en cualquier play off de Primera División ordinario, con los cuartos de final y las semifinales al mejor de tres encuentros y la final de cinco, éste se juega a partido único y no existe el factor cancha, pero sí hay un condicionante que premia al mejor de la clasificación regular: en caso de empate, no hay ni prórroga ni penaltis, el encuentro se resuelve a favor del equipo que terminó más arriba en la tabla al cierre del torneo regular, según las normas de competición.