La Fed Cup ha cambiado este año de formato. Al igual que la Copa Davis, ha iniciado una nueva etapa. En el complejo de La Manga Club, en Cartagena, se disputa una de las eliminatorias de clasificación para las finales que se celebrarán en abril en Budapest. España, pese a jugar en casa, partía en clara desventaja ante Japón, liderada por Naomi Osaka, una ex número uno del mundo con dos Grand Slam en su palmarés. Sin embargo, después de la primera jornada que se celebró ayer, el combinado que dirige Anabel Medina domina por un contundente 2-0 y sin ceder sus jugadoras ni un solo set. Por tanto, ya se encuentra a un solo triunfo de lograr el pasaporte. Sara Sorribes, que protagonizó la sorpresa de la jornada venciendo a Osaka en el partido inaugural por 6-0 y 6-3, y Carla Suárez, que superó a Misaki Doi, 86 del mundo, por 6-3 y 6-4, fueron las artífices de los triunfos en los dos encuentros de individuales que abrieron este España-Japón.

Sara Sorribes, de 23 años y sin ningún título WTA, que había caído en la segunda ronda del Abierto de Australia de este año y que ocupa actualmente el puesto 78 del mundo, era la víctima propicia para una Osaka con dos Grand Slam en su palmarés, que llegó a liderar el ránking mundial en junio de 2019. La española nunca había ganado a una 'top 10' en su vida y llegaba de realizar una discreta gira australiana. Pero los pronósticos, en el deporte, están para romperlos, y más en el tenis femenino, donde un día sí y otro también se dan sorpresas. De entrada, Sorribes, que está entrenada por Germán Puentes, logró un 6-0 en apenas media hora de juego. La castellonense explotó su revés cortado, poniendo la bola casi a los pies de Osaka en cada punto, mientras que con su derecha sacó a su rival casi de la pista, obligándola a realizar devoluciones por encima del hombro, con gran dificultad para el golpeo. Nunca estuvo metida en el partido la número diez del mundo, que cedió el primer juego con su servicio en blanco. La castellonense se creció y después de salvar una bola de break en el primer juego con su servicio, se puso 2-0. La reacción se esperaba en cualquier momento, pero tampoco llegó en el tercer juego, que se anotó la española en blanco después de cometer la japonesa una doble falta. Prosiguió el camino triunfal de Sorribes, buscando cambiar el ritmo de su rival con el revés cortado, en la cuarta manga y lo hizo después de salvar una bola de rotura se servicio. Y tras anotarse la jugadora local el quinto con el tercer break, en el sexto dispuso de dos bolas de partido y sentenció en la primera para hacer un 6-0 que no podían prever ni los más optimistas.

Osaka sacó las garras en el arranque del segundo set. Se situó con un 0-2 tras romper el servicio a la española, que recuperó su excelente nivel del primer set en un tercer juego donde sumó dos espectaculares puntos desde el fondo de la red. Sorribes recuperó la confianza en su servicio para igualar el set (2-2) y en el siguiente, Osaka tuvo que salvar una bola de rotura de servicio para hacer el 2-3. Pero a partir de ese momento cambió de nuevo el choque. La castellonense sumó cuatro juegos consecutivos para hacerse con el partido y provocó las lágrimas de impotencia en Osaka.

«He jugado el mejor partido de mi vida, estoy muy emocionada», decía al concluir el choque la española, quien rompió a llorar tras abrazarse con su entrenador, Germán Puentes. «Estoy encantadísima porque aquí también están mis padres y creo que ha salido todo bastante rodado», afirmó.

Sobre Carla Suárez, la más veterana, la jugadora que está disputando su última temporada como profesional, recaía la responsabilidad de lograr el 2-0. Venció por 6-3 y 6-4 después de entrar en el partido con el pie cambiado, sufriendo un break en el primer juego. Pero jugar en casa dio alas en un partido que se disputó con el cielo encapotado. Tiró de experiencia después de verse 0-2 en el marcador, para sumar cuatro juegos consecutivos y pasar a ser la dominadora. En el 5-3 dejó a su rival en blanco y logró el set rompiendo el servicio a su rival a la tercera oportunidad.

Tampoco estuvo fina en el primer juego del segundo set la española. Se vio de repente con un 0-2, pero casi calcó la primera manga, ya que sumó cuatro juegos consecutivos para llevar el partido al 4-2 después de una rotura de servicio. Pero Doi vio debilidades en su rival y logró un otro break para igualar el partido (4-4). Recuperó las buenas vibraciones Suárez con su servicio para hacer el 5-4 y en el décimo juego rompió el servicio a su rival después de ponerse 0-40. A la primera oportunidad cerró la victoria y sumó el segundo punto.

Hoy, en la segunda y última jornada, Carla Suárez tendrá la oportunidad de sentenciar, pero para ello tiene que ganar en el partido que abrirá la jornada a Osaka a las once. A continuación le tocará el turno a Sorribes, que ayer logró que la ausencia de Garbiñe Muguruza no pesara en el ambiente. Se enfrentará a Doi. En caso de igualar Japón la eliminatoria, todo se decidirá en el choque de dobles, donde la pareja elegida por la capitana española es la formada por Aliona Bolsova y Georgina García. Pero nadie quiere que se llegue hasta ese punto y que España logre antes el pasaporte.