Era un partido a priori muy desigual por parte del UCAM B, el líder del Grupo XIII de Tercera División, ante una Minerva que, en puestos de descenso, ayer arañó su segundo empate en las ocho jornadas que se llevan disputadas. Sin embargo, la distancia en la clasificación no se reflejó tanto sobre el césped en un partido que se puede calificar como igualado y que bien pudo haberse llevado cualquiera de los dos de haber estado más certeros en las diferentes ocasiones.

Para ver goles hubo que esperar a la segunda mitad, ya que en el primer acto, además de un par de tiros desviados, apenas se pudo reflejar nada de consideración que terminara influyendo en el resultado final del encuentro.

Después de pasar ambos equipos por los vestuarios todo se animó un poco hasta el punto de que la Minerva falló la ocasión más clara de su equipo para que, acto seguido, los locales se adelantaran por medio de un penalti. Los visitantes no bajaron los brazos y cinco minutos después del primer tanto, David se inventó un tiro cruzado que sorprendió a todos y que provocó el reparto de puntos.