Pedro Contreras fue uno de los estrechos colaboradores de Raúl Moro. El murciano, que nunca tuvo un cargo establecido, pese a sonar para todos, se encargaba sobre todo de vender publicidad, aunque también intentaba manejar el departamento de comunicación y márketing. Durante el año que estuvo en la entidad grana siempre defendió que no tenía ningún sueldo establecido, pero antes de ser despedido por Mauricio García de la Vega, según ha podido saber esta redacción, el murciano facturó al club cerca de 40.000 euros. Esa información fue confirmada ayer por Víctor Gálvez. Aunque al principio el oriolano no quería entrar en ese tema, finalmente, apoyado en su hijo -Víctor Valentino- y en Toni Hernández, reconoció que «tiene facturas por cobrar» y que la cantidad ronda los 40.000 euros.