El tenista Juan Carlos Ferrero disputó el último partido de individuales de su carrera profesional, tras caer derrotado en la primera ronda del Valencia Open 500 ante Nicolás Almagro por 7-5 y 6-3, después de 1 hora y 40 minutos de partido.

El jugador valenciano plantó cara a un Almagro que se está jugando sus posibilidades de entrar en la Copa Masters de Londres y con quien comparte entrenamientos y entrenador desde hace poco más de un año.

La pista central del Ágora recibió con aplausos y carteles de apoyo a Ferrero, que comenzó muy fuerte y rompió el servicio al jugador murciano en el juego inaugural y tomó una renta inicial de 2-0, que rápidamente contrarrestó Almagro.

La mayor agresividad y condición física del sexto cabeza de serie le llevó a voltear el marcador y disponer de un 5-3 y servicio para cerrar el primer set. Sin embargo, el espíritu de campeón de Ferrero le llevó a no entregarse y peleó cada punto para tratar de llegar al juego de desempate, pero Almagro le quebró el servicio en el duodécimo juego y se llevó el parcial.

En la segunda manga, Almagro arrancó muy fuerte, haciendo mucho daño con sus golpes a un Ferrero que se defendía como podía y que en un abrir y cerrar de ojos se vio con un 3-0 abajo.

De nuevo reaccionó el ex número uno mundial y con pundonor recuperó el saque perdido, pero cuando sacaba para empatar a tres, un nuevo arreón de Almagro, a pesar de quejarse ostensiblemente del hombro derecho, le permitió cerrar el partido y la carrera de un Juan Carlos Ferrero, que este miércoles, tras el dobles que jugará con David Ferrer recibirá el homenaje oficial de su despedida.

A la conclusión del partido, todo el público de la pista central se puso en pie y ovacionó a un emocionado Ferrero, que lanzó la raqueta, la camiseta y la muñequera a los pupilos de su academia.

"Gracias a todos por el cariño"

Después tomó el micrófono para agradecer el apoyo recibido tanto por su equipo, como sus familiares, amigos y afición durante todos sus años como profesional.

"Mañana- por hoy - voy a tener que hablar otra vez y no me gustaría repetirme. Quiero daros las gracias a todos por el cariño que he sentido. Pero no sólo hoy, ha sido muy especial para mí, también por este torneo" dijo Ferrero sobre la azulada pista del 'Ágora', donde no se olvidó de su equipo.

"A todos ellos, a mi equipo que siempre ha estado ahí", añadió el de Onteniente, que se va con un Grand Slam en su palmarés y 4 Masters 1000, además de tres Copa Davis. Ferrero, por su parte, repasó su último duelo ante Almagro, con quien cayó por 7-5 y 6-3. "He jugado bastante regular, pero no lo esperaba tan siquiera", dijo.

"Era un partido fácil para él, pero yo le he visto un poco incómodo. Yo salí lo más relajado posible, me encontré bastante bien y en el segundo set estuve un pelín mejor. Sin embargo, él está en muy buena forma y acabó pegando muy buenos golpes", comentó.

Por último, Ferrero -que mantiene una buena amistad con Almagro- explicó qué ocurrirá con su futuro, que continuará ligado al tenis. "Ya es muy bueno de por sí. Ser 11 o 12 del mundo es por algo. Yo quiero apoyarle y dar ese pequeño plus. Si eso lo consigo acompañándolo ojalá sea así y disfrutemos los dos", concluyó.

La "amarga" victoria de Almagro

Por su parte, Nicolás Almagro reconoció que ganar a Ferrero ha sido "la victoria más amarga" de su carrera deportiva y admitió que le encantaría estar a su lado, ahora que deja definitivamente las pistas.

"Ha sido la victoria más amarga de mi carrera. Es uno de los mejores tenistas y un gran apoyo para mí. El año que viene espero que viaje conmigo para seguir aprendiendo mucho de él", comentó Almagro. El murciano se centra en poder obtener la clasificación para la Copa Masters, algo que ya ha reconocido como "el sueño de cualquier niño". "Me quedan dos torneos por jugar y voy a darlo todo para estar allí", comentó Almagro, que se medirá a Querrey en segunda ronda del torneo valenciano.