El Grupo de Teatro de San Javier estrena esta noche sobre las tablas del Auditorio Parque Almansa del municipio Antígona, obra del poeta trágico griego Sófocles y que representa «todo un símbolo de lucha y determinación» en la figura del mito homónimo basado en este personaje femenino de la Antigua Grecia. La cita forma parte de la 52ª edición del San Javier FEST y, para la ocasión, el grupo de teatro sanjaviereño ha querido ir más allá y dar un salto cualitivo en el montaje. La representación contará con la participación del actor Manuel Brun, que presume de tener una larga trayectoria profesional en teatro, series de televisión y cine, que actúa y coodirige el montaje junto a José Antonio Navas. «Ha sido una gran experiencia para el grupo trabajar con un profesional como Manuel Brun. Este proyecto nos ha permitido unir la profesionalidad de Manuel con el entusiasmo propio que tiene el grupo amateur. Esto es lo que ha hecho que la obra tenga una gran calidad», detalla a La Opinión el propio Navas.

La colaboración del grupo local con Manuel Brun surgió tras el encuentro en un taller teatral de José Antonio Navas con Brun, que le expresó el deseo de volver a poner en pie, veinte años después, la historia de la trágica heroína griega en la que interpretó el papel de Creonte. Navas, respaldado por el grupo de actores, no tardó en invitarlo a cumplir su deseo convencido de que esta colaboración sería «una experiencia enriquecedora para todos». Antígona, que ha pasado a través de los siglos como sinónimo de resistencia y reivindicación, es en la obra heroína y víctima al rebelarse contra el decreto que ha proclamado Creonte para que el cadáver de su hermano no sea enterrado. Para Navas, Sófocles presenta a una mujer que opta por la rebeldía frente a la sumisión , una mujer que se enfrenta al poder establecido y se manifiesta contra la injusticia aunque tenga que pagarlo con su vida. La distancia entre Manuel Brun, que vivía en Madrid, y el grupo local, obligó a trabajar con ensayos intensivos durante los fines de semana, desde diciembre, para poner en pie una función que cuenta con 28 artistas sobre el escenario, entre bailarianas, actores y coro.

«Durante la semana íbamos ensayando algunas escenas con los actores, mientras que la puesta en común la hacíamos los fines de semana cuando venía Manuel», relata Navas. Además, el codirector del montaje explica que el «principal reto» al que se ha enfrentado el grupo es que uno amateur se coordine y trabaje también con la figura del coro: «Pulir todas las voces ha sido una tarea muy complicada. «Queremos destacar la labor fantástica que ha realizado la directora del coro, Laura Pérez, que ha dado un gran resultado y que ha conseguido que el coro suene como una sola voz». La versión de la obra, actualizada pero fiel al texto clásico, se representa sobre una escenografía en dos alturas que sirve para colocar en la parte alta el Palacio, que simboliza el poder, y en la más baja al pueblo.