Una cincuentena de empresas participan en el espacio comercial del Festival de Cine Erótico que mostrará las últimas novedades del sector y exhibirá artículos como pastelería erótica, ropa, películas y juegos.

El portavoz del salón, José María Ponce, ha explicado hoy en rueda de prensa que "la principal novedad de la edición de este año es que se dedica un espacio específico del festival a la mujer, que en los últimos años está reclamando muchos aspectos propios de su sexualidad".

Este sector de público ha crecido notablemente a lo largo de la historia del festival (100.000 mujeres en los últimos 14 años) "que al principio tenía más público masculino", ha agregado Ponce.

En el espacio dedicado a las mujeres se programarán desfiles; propuestas de maquillaje, tatuajes y peluquería; sesiones prácticas de "streptease"; talleres de sexualidad y clases de "glamour".

Otra de las novedades de la edición de este año del festival, según su portavoz, "es que el Club Bizarre se convierte en un espacio mucho más abierto, como un bar temático", donde se mostrarán espectáculos de sado y "fetish".

Las tradicionales sesiones sadomasoquistas en directo se completan con expositores especializados en este sector, presentaciones de libros y desfiles de moda.

El portavoz del festival ha recordado que la edición de este año incorpora la presencia de "Maskaman", un personaje que lleva el rostro cubierto con una máscara y que se autodenomina el mesías del porno.

"En esta edición el personaje tendrá su propio confesionario en el salón y el sábado día 6 ofrecerá un particular concierto en el que ha anunciado que descubrirá su rostro", ha dicho Ponce.

Otro de los espacios destacados del festival es el Heat Gay, dedicado exclusivamente a un público homosexual, "otro de los sectores que ha crecido a lo largo de la historia del salón", según su portavoz.

El festival también acogerá el estreno de la última producción del actor porno Rocco Siffredi, que regresa a los platós con "Furious Fucker", un largometraje en el que conjuga el porno con su pasión por las motocicletas.

En el recinto ferial de La Farga se han instalado tres escenarios en los que cada día se programan actuaciones de "streptease", sesiones de sexo en vivo y el rodaje de una película porno del realizador Pierre Woodman.

El festival de este año, que se prolongará hasta el domingo, será el último que acogerá el recinto de La Farga después que el Ayuntamiento de L'Hospitalet haya decidido no renovar el contrato con la dirección del salón.

La organización del festival, que espera la visita de casi 60.000 personas en los cinco días que durará el salón, busca ahora un nuevo espacio en el área metropolitana de Barcelona "que es donde nació y donde se quiere quedar", según Ponce.