La mayoría de diputados del Parlament se inclina por permitir la tramitación de la iniciativa legislativa popular (ILP) que pide prohibir las corridas de toros en Cataluña y abrir así un debate que pone en peligro la lidia en esta comunidad.

Las consultas hechas por Efe entre los diputados de los seis grupos revelan que hay más parlamentarios contrarios a las corridas que defensores del toreo, por lo que, salvo sorpresas de última hora, la ILP antitaurina, que probablemente se votará a mediados de diciembre, tiene serias opciones de prosperar.

De hecho, representantes de los principales partidos catalanes admiten en privado que la ILP tiene muchas posibilidades de recibir luz verde en diciembre y poder así iniciar sus trámites en comisión. Y eso, pese a que la polémica iniciativa genera adhesiones y rechazo de manera transversal entre los principales grupos de la Cámara, especialmente en CiU y PSC, aunque la balanza se decanta a favor de dar trámite a la ILP y rechazar así las enmiendas a la totalidad presentadas por socialistas, PP y grupo mixto. Pese a sus características específicas, este debate llegará en un momento político de especial tensión, marcado por la incertidumbre sobre el Estatut, un aspecto que según algunas fuentes puede tener influencia porque, si se recorta el texto, puede haber una reacción en parte de la sociedad en contra de la "simbología española".