El pasado mes de marzo F.G.T, una murciana vecina de Cabezo de Torres, acudió a la AECC de Murcia para someterse a una mamografía tras haber recibido la citación del programa de cribado de cáncer de mama. Dos meses después llamaba por teléfono para reclamar el resultado, ya que no se los habían comunicado, y «en junio me llegó que el resultado era negativo». Sin embargo, explica, unas semanas después notó un pinchazo en el pecho y al tocarse notó un bulto. «En principio estaba tranquila porque tenía una mamografía reciente en la que me dijeron que no tenía nada, así que esperé a una cita que tenía programada con mi ginecóloga unos días después y en la consulta se lo comenté».

Su ginecóloga le solicitó una mamografía y una ecografía del pecho, «pero como no me llamaban para la cita decidimos ir a un médico privado y salir de dudas».

El doctor Nieves le diagnosticó a esta paciente un carcinoma de 2,5 centímetros y «nos dijo que no era reciente, que eso ya estaba ahí cuando me hicieron la anterior mamografía, pero que no lo habían visto». Lo mismo que le ha dicho ahora la oncóloga que la está viendo en el Hospital Morales Meseguer de Murcia, según indica su marido.

«No entendía cómo era posible que me hubieran diagnosticado cáncer con una prueba tan reciente que era negativa. Se me vino el mundo encima porque sólo unos meses antes me dijeron que era negativa y el cáncer ya estaba ahí», relata la afectada.

Pese a que reconoce que «el trato en el Asociación Española Contra el Cáncer ha sido siempre muy bueno», no entiende qué es lo que ha pasado y teme que su misma situación pueda repetirse en otras mujeres, «que salgan tranquilas tras un diagnóstico de cáncer negativo y sí que tengan la enfermedad».

F.G.T. dice que en la propia AECC le reconocieron que hay ocasiones en las que la mamografía no es suficiente para tener un diagnóstico fiable y para ver bien la mama. «Y ellos mismos se movieron desde la AECC para agilizarme las pruebas en el Morales».

La paciente ya ha sido vista en el hospital del Área VI de Salud y está pendiente de una intervención para someterse a una mastectomía en los próximos días. Su marido apunta que «incluso la cirujana nos ha reconocido que si la prueba se hubiera realizado en el hospital no se hubiera producido este error», por lo que ya han puesto el caso en manos de un abogado especializado en el ámbito sanitario para valorar si emprenden acciones legales «por este diagnóstico erróneo».