Síguenos en redes sociales:

Energía

"Vi clarísimo que aquí había que apostar por las fotovoltaicas"

El ahorro que suponen las placas puede aumentar si se recurre al sistema de compensación con la red

"Vi clarísimo que aquí había que apostar por las fotovoltaicas"Solete Slow Photo

José Zambudio instaló diez placas solares en la casa de su madre a finales de 2020. «Vimos que la luz no paraba de subir y que, haciendo números, a la larga salía mucho más barato apostar por las fotovoltaicas». Redujeron los kilowatios contratados en la red de distribución (cuatro) y sumaron otros tres en las placas.

«Mi madre se ha jubilado hace poco y se pasa la mayoría del día en casa, vimos que así íbamos a conseguir ahorrar bastante, y al principio no lo notamos, pero en cuanto activamos la compensación [se refiere al mecanismo que consiste en verter a la red, y, posteriormente, cobrarlo, el excedente de energía que producen las placas] nos hemos ido esta primavera y este verano a un ahorro del 50%.

"El último aliciente"

Francisco José García es un ferviente defensor del autoabastecimiento energético. A finales de junio instaló en su empresa, Frutas y Verduras de Lorca, las placas necesarias para obtener 120 kw. «Viendo la subida de la luz y que en esta zona tenemos sol por castigo, es de sentido común apostar por las fotovoltaicas para reducir costes en la empresa». De hecho, García sopesa aumentar la superficie de fotovoltaicas en sus naves: «Estamos haciendo una ampliación y tengo que hacer números, pero seguramente aumentemos el número de placas para doblar los kilowatios, queremos pasar de 120 a 240. Lo venía pensando desde hace bastantes años, pero la subida de la luz ha sido el último aliciente que necesitaba».

En concreto, lo venía pensando desde hace dos años, cuando instaló cuatro kw en su casa y otros tantos en los domicilios de su padre y su hermana.

«Las pusimos sin subvenciones y ya te digo que, si no están amortizadas, poco les falta. En mi casa, yo pagaba de 120 a 150 euros en verano y ahora llevo desde marzo pagando el mínimo. Mi padre, con una casa más grande, podía gastar unos 250 euros al mes fácilmente. Ahora paga 50 euros el mes que más». Francisco José también ha recurrido al sistema de compensación: «Es un plus, le resto aún más a la factura».

Ahora espera poder trasladar ese ahorro a los números de su empresa: «Estoy deseando que llegue la primera factura, creo que va a haber un ahorro grande. He ido comprobando semana a semana el gasto y calculo, como mínimo, que ha habido un 30-35% menos de gasto, y eso que en un almacén hortofrutícola los meses de julio y agosto son temporada alta, he tenido las cámaras a pleno rendimiento». Las cuentas, propulsadas por una ayuda de la Comunidad del 40% del gasto, le salen: «El ahorro, además, va a ser mayor cuanto más suba el precio del kilowatio. Si no para de aumentar, la amortización de mi inversión llegará bastante tiempo antes».

Pulsa para ver más contenido para ti