La Plataforma en Defensa del Ferrocarril, que ayer llevó a Lorca la protesta contra el cierre de las Cercanías y de la línea de Chinchilla, recuerda al Ministerio y a Adif que todos los proyectos del AVE a Almería adjudicados hasta ahora establecen la compatibilidad de las obras con el mantenimiento del tráfico ferroviario, según explicó el sindicalista Antonio del Campo, que es uno de sus portavoces. Las organizaciones que integran la Plataforma no descartan que la desconexión ferroviaria de la Región pudiera durar nueve años o más, dado que el plazo de ejecución de las infraestructuras ferroviarias «se triplica en muchas ocasiones».

Adif pretende cerrar en otoño la línea de Cercanías que conecta Murcia con Lorca y Águilas y la conexión de larga distancia con Cieza y Chinchilla para realizar con mayor facilidad el soterramiento del AVE en Barriomar y los demás tramos de la Alta Velocidad a Almería, en lugar de ir aplicando cierres puntuales, tal y como hizo mientras se construía la Alta Velocidad en dirección a Alicante. «La situación no ha cambiado desde que se adjudicaron los proyectos en 2019», apuntó Del Campo.

Recordó que la Comunidad y el Ayuntamiento de Murcia «aportan el 40% del presupuesto de la nueva estación del Carmen y del soterramiento de Barriomar a través de la sociedad Murcia Alta Velocidad, pero aún no han recibido información sobre el cierre».

Del Campo, que fue miembro del consejo de administración de Renfe, asegura que «ninguna obra en las líneas ferroviarias construidas en España ha dejado fuera de servicio 250 kilómetros de trazado, privando del tren a 1,2 millones de viajeros, tal y como pretende hacer el Ministerio». La única excepción es la del AVE de Granada, que durante tres años «obligó a los viajeros a hacer en autobús 90 kilómetros hasta Antequera (Málaga)», aunque en principio estaba previsto que la desconexión durara solo un año.

«Sabemos que se tienen que producir cortes puntuales de semanas o de meses y que habrá incomodidades», admitió, pero da por hecho que las obras en Lorca no empezarán en varios años, dado que aún se están discutiendo las soluciones al trazado propuesto en el municipio.

Añadió que, además del elevado número de vehículos que el corte del tren sacará a la carretera, provocará un colapso de estas vías, dado que el cierre de las Cercanías con Lorca y Águilas dejaría sin tren a casi 3.000 viajeros diarios.

Del Campo explicó que el Ministerio aduce la necesidad de acelerar las obras para evitar que puedan perderse ayudas de los fondos Next Generation si los proyectos no se ejecutan a tiempo, pero él sostiene que los tramos en proyecto están financiados con cargo a otros programas diferentes, dado que el Corredor Mediterráneo debería estar ya ejecutado en la Región.

El portavoz de la Plataforma reprocha Adif que «apenas ha puesto en marcha los tramos adjudicados en 2019», pero ahora se escuda en la premura impuesta por los fondos destinados a la recuperación de la pandemia para cerrar las líneas de Lorca y Águilas y de Chinchilla.

Recordó igualmente que el corte dejaría aislada la estación de mercancías de Nonduermas y el tráfico de carga de Escombreras, que mueven unas 300.000 toneladas al año. También quedaría inutilizado el taller de reparación de Renfe situado en Nonduermas.