La Región pide el desbloqueo de la negociación de la nueva PAC para "abordar el futuro con certeza"

El Gobierno regional ha demandado el desbloqueo de la negociación de la nueva Política Agraria Común (PAC) para permitir al sector agrario abordar con certeza su actividad para los próximos años. Así quedó de manifiesto durante el Consejo Consultivo de Política Agrícola y Política Pesquera, presidido por el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas.

El consejero de Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente, Antonio Luengo, intervino en la sesión y lamentó que «han pasado ya tres años desde que la Comisión presentara al Parlamento Europeo y el Consejo Europeo su propuesta para guiar el futuro de la agricultura y la ganadería, lo cual roza la falta de respeto hacia el trabajo y dedicación del sector agrario europeo».

«Mostramos nuestra lealtad y disposición ante el Gobierno de España, pero no vamos a permitir que se excluyan las necesidades del sector en la Región, claramente perjudicada, por sus condicionantes climatológicos y edafológicos», destacó el consejero, «por lo que necesitamos que el Ministerio detalle una propuesta concreta».

El titular de Agricultura recordó las exigencias defendidas en cuestiones clave como la definición de agricultor genuino, «donde parece confirmarse que dejaremos atrás la ambición inicial de limitar las ayudas a los agricultores que verdaderamente viven de la agricultura y la ganadería», o la regionalización, «donde seguimos mostrando nuestro rechazo al mantenimiento de los derechos históricos para el cálculo de los importes a percibir, algo que hasta hace poco también compartía el Ministerio».

Por otro lado, Luengo reivindicó «la necesidad de considerar al secano de Levante como región, al igual que ocurre con las Islas Baleares por su carácter insular, lo que potenciaría las posibilidades de percibir más ayudas para una zona que debe hacer frente a condiciones climatológicas extremas, lo que conlleva un gasto superior al de otros agricultores».

En relación a las ayudas asociadas, «existe una gran incertidumbre de si van a ser suficientes para compensar a los sectores más afectados por la convergencia, como es el caso de la ganadería», explicó Luengo, ya que «la reducción del valor de los derechos para el caso de la ganadería con poca base territorial y la exclusión del sistema de pago básico a la renta para los que no tienen superficie asociada va a contribuir al abandono de la actividad en los sectores ganaderos considerados vulnerables».