A principios de 2020, antes de que se iniciase la pandemia de covid, una violenta banda traía en jaque a la Policía en la Región: eran delincuentes que se dedicaban a robar en gasolineras, salones de juegos y concesionarios de coches de distintos municipios. Y nunca se les llegó a coger. Se les bautizó como ‘la banda del Porsche’ por el vehículo de alta gama que empleaban en sus palos. Vehículo que era encontrado calcinado en el polígono de Totana: lo habían quemado para borrar pistas.
Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que investigan los cinco asaltos a salones de juego de Santomera, Librilla, Cartagena, Las Torres de Cotillas y Abarán en una misma noche no descartan que, tras estos robos, se encuentre la misma banda itinerante, que habría vuelto a actuar en la Región de forma puntual, apuntan fuentes cercanas al caso.
Asimismo, se investiga si el coche que aparecía calcinado horas después de los robos en una granja en mitad del campo, en Alhama, tiene algo que ver con estos ‘palos’. En los últimos, en la madrugada del pasado jueves, las cámaras los captaron con un BMW de color grisáceo, presumiblemente robado.
La Policía Nacional y el Instituto Armado unen sus fuerzas para identificar y capturar a grupo de ladrones, del que sospechan que está formado por auténticos profesionales del delito.
Lo que hicieron en una noche
Dieron cinco 'palos' en una noche y se hicieron con un botín que, de momento, no ha sido comunicado. Desde la Policía Nacional y la Guardia Civil ya van tras la pista de estos individuos, los cuales, dado su modo de actuar y el poco tiempo que tardan en perpetrar cada uno de los asaltos, hace pensar a los investigadores que se trata de unos profesionales.
Una banda robó en cinco salones de juego de la Región en una madrugada, indican fuentes cercanas al caso. Los golpes se produjeron en las localidades de Santomera, Las Torres de Cotillas, Cartagena, Abarán y Librilla, detallan las mismas fuentes. Los sospechosos se desplazaron en un vehículo de alta gama.
Explican fuentes cercanas a la investigación que este tipo de delincuentes suele centrarse en las máquinas, con el fin de obtener la recaudación. Aunque llevarse una máquina es muy complicado, lo que hacen es reventarlas: las tragaperras tienen dentro un cajón, con el dinero, cuyo cerrojo es relativamente sencillo de forzar para este tipo de amigos de lo ajeno, que son especialistas.
Es más, los investigadores no se sorprenderían si el coche en el que se desplazaron los ladrones en la madrugada de ayer es hallado en breve abandonado en un paraje. Y hasta destrozado, para borrar pistas. En febrero, sin ir más lejos, el automóvil que emplearon los cuatro encapuchados que, a punta de machete, asaltaban una gasolinera en Santomera, aparecía quemado en Orihuela. Resulta que el turismo figuraba como robado en Albatera, localidad de Alicante.
Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad ya trabajan con el análisis de las imágenes de las cámaras de seguridad, tanto de los establecimientos como las cercanas que pueda haber, para tratar de dar con una pista que lleve a la identificación y posterior arresto de la banda. Se les imputan, de momento, cinco delitos de robo con fuerza en las cosas, ya que no atacaron a personas.
