Ciudadanos ha iniciado el expediente de expulsión del diputado y presidente de la Asamblea Regional, Alberto Castillo, tras abstenerse este miércoles en la votación de la propuesta presentada por el también expulsado Francisco Álvarez, para designarse portavoz del Grupo Parlamentario --cargo ostentado hasta el momento por Juan José Molina--, y el reparto de las portavocías en las comisiones.
Así lo ha anunciado este jueves en declaraciones a Onda Regional de Murcia, recogidas por Europa Press, la coordinadora autonómica de Ciudadanos y diputada en la Asamblea Regional, Ana Martínez Vidal, quien ha reprobado la actitud de Castillo, que también se abstuvo en la votación de la moción de censura presentada por la formación 'naranja' y PSOE para desbancar al PP del Gobierno regional.
Además, Martínez Vidal y Molina van a presentar una moción en el parlamento autonómico para que Castillo no siga siendo presidente de la Asamblea.
Cabe recordar que Francisco Álvarez ha presentado su cese como consejero de Empleo, Investigación y Universidades, cargo que ostentaba desde hace tres semanas, para ser portavoz del Grupo Parlamentario de Ciudadanos, partido del que fue expulsado, en la Asamblea regional de Murcia.
El anuncio de dimisión fue trasladado por Álvarez este mismo miércoles a los diputados de Cs, en una reunión en la que además expuso el nuevo organigrama del Grupo Parlamentario, según el cual él ocupará la presidencia de casi todas las comisiones. En esa reunión, Castillo no permitió la entrada al secretario de Acción Institucional de Cs, José Gabriel Sánchez Torregrosa, mientras que sí que pudo estar presente un notario a petición de los diputados tránsfugas.
Diego Conesa, secretario general del PSOE, considera que Alberto Castillo no puede seguir siendo el presidente de la Asamblea Regional de Murcia, pues es corresponsable y colaborador necesario de pisotear la voluntad de la ciudadanía de la Región expresada en las urnas.
Diego Conesa ha explicado que Alberto Castillo "revienta las costuras de la representación de su partido con sus abstenciones", y deja la imagen de la Región "por los suelos".
Desde Podemos consideran que la Asamblea de la Región de Murcia "no puede estar presidida por un tránsfuga sin rastro de vergüenza", en referencia a Alberto Castillo. Su portavoz, María Marín, "fue la primera en sufrir su despotismo y falta de escrúpulos", por lo que para la formación morada "no es ninguna sorpresa que ahora lo sufran sus propios compañeros de partido", recuerdan desde la formación.
La portavoz ha señalado que Castillo "no está a la altura del cargo" y que su permanencia como la segunda autoridad de la Región de Murcia "demuestra la degradación de nuestras instituciones".
