El secretario general del PSRM, Diego Conesa, exigió ayer a López Miras «que deje por unas semanas el politiqueo, se olvide de Casado y del PP y se centre, exclusivamente, en gestionar la crisis en la Región, además de coordinarse con los ayuntamientos, agilizar el proceso de vacunación y tomar las medidas sanitarias necesarias».

«Estamos en un momento muy complicado, con los peores datos epidemiológicos desde que comenzó la pandemia. Apelamos a la responsabilidad ciudadana y apoyamos las medidas sanitarias que se tengan que tomar, pero también exigimos responsabilidad a quien ostenta el mando único sanitario desde hace muchos meses, que es el Gobierno regional y su presidente López Miras», indicó en la rueda de prensa organizada ayer.

El líder socialista recordó que el presidente regional aseguró que la Región estaría preparada para la segunda ola, pero «desgraciadamente, ni lo estaba para controlar la segunda, ni lo ha estado para la tercera ola».

«De las medidas que ha tomado el Gobierno regional, sabemos que el 20 por ciento de los estudiantes de Primaria y 1º y 2º de la ESO está en su casa un día a la semana, una medida que sólo se ha tomado en la Región; también sabemos que el Gobierno regional ha recibido 411 millones del Gobierno de España para reforzar educación, sanidad y otros servicios públicos, pero, a fecha de hoy, no sabemos a qué ha destinado el Ejecutivo de López Miras este dinero», añadió. Conesa insistió en que el Gobierno regional «no ha reforzado la Atención Primaria, ni los rastreadores, tal y como lleva exigiendo el PSRM desde el inicio de la pandemia, y además, el proceso de vacunación va demasiado lento». Además, criticó que el transporte público se haya reducido «de manera irresponsable».

El parlamentario popular, Joaquín Segado, respondió que la Región cuenta con 500 rastreadores, por encima de lo recomendado por la OMS y que se ha reforzado la plantilla de sanitarios en un 14 por ciento con respecto a 2019. Para Segado, la mala gestión está en el Gobierno de Pedro Sánchez mientras que la Región ha actuado «con mucha valentía y determinación».