Cerca de 100.000 trabajadores del sector agroalimentario de la Región de Murcia están llamados a la huelga general del viernes 4 de diciembre que organizan de manera conjunta CCOO y UGT.
Los sindicatos critican las condiciones precarias de los trabajadores del campo y los almacenes agrícolas. Con la intención de dar a conocer los motivos que les han llevado a convocar esta huelga, CCOO organizaba esta mañana en Cartagena una comparecencia en la sede del sindicato en la ciudad portuaria.
El delegado comarcal de CCOO en Cartagena, José Ibarra, explica que "no podemos comprender como siendo un sector estratégico en la Región, los trabajadores del sector agrícola murciano son los peor pagados del país", según apunta Ibarra, entre el 80 y el 90% de los empleados del sector en la Región "no superan el salario mínimo interprofesional". Además, el delegado comarcal asegura que algunos empresarios "ni si quiera querían aplicar las subidas legítimas del salario mínimo interprofesional y hemos tenido que llegar a los tribunales".
Además, en estos momentos las negociaciones colectivas con las patronales del sector se encuentran paralizadas. El convenio Agrícola, Forestal y Pecuario expiró en 2018 y el de las empresas cosecheras y productoras de tomate en 2019. Ibarra asegura que desde ese momento las empresas están paralizando ambos convenios "a través de propuestas inasumibles" e insiste en la voluntad de los sindicatos de negociar.
Asimismo, el secretario general de CCOO Industria de la Región de Murcia, Enrique Bruna, reclama al Gobierno regional que ponga en marcha actuaciones para acabar con la economía sumergida en el sector agroalimentario como ya se acordó en el año 2012 a través del Plan contra la economía irregular. Así como vigilar que las empresas del campo murciano cambien sus estrategias de contratación y no hagan un uso abusivo de las Empresas de Trabajo Temporal, que están provocando que las plantillas de las empresas sean mínimas y que casi un 90% de los contratos se gestionen a través de la subcontratación.
También exige al Gobierno central una solución a las carencias en materia de derechos sociales que padecen los empleados que trabajan como fijos discontinuos.
Los sindicatos solicitan de igual manera, dotar a la inspección de trabajo de más medios para contar con un mayor control y evitar que se produzcan más episodios de acoso y agresión sexual y explotación laboral.
Tras la huelga de este viernes 4 de noviembre CCOO y UGT planean una manifestación para toda la Región que se celebrará en Murcia en el mes de enero.
