Desde 1985 se celebra, cada 16 de septiembre, el Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono, una fecha que conmemora el acuerdo alcanzado hace 35 años en la Convención de Viena, en la que los principales actores políticos, científicos e industriales se comprometieron a trabajar juntos y eliminar el 99% de las sustancias que dañan y reducen la capa de ozono bajo el amparo del Protocolo de Montreal.

En consonancia con esta iniciativa y consciente de que la salud de las personas depende en gran medida de la calidad ambiental del entorno en el que conviven, el Grupo HLA al que pertenece el Hospital HLA La Vega, cuenta desde hace varios años con un plan medio ambiental que minimiza al máximo las emisiones contaminantes de sus centros y, por ende, reduce las sustancias que dañan la capa de ozono. Entre las iniciativas más ambiciosas se encuentra la gran inversión desarrollada en su red asistencial para sustituir gases refrigerantes contaminantes por otros que lo son menos e implantar un plan preventivo que los regula y evita posibles fugas.

Durante todo este año se están llevando a cabo auditorías energéticas en todos los centros de la red asistencial del Grupo con el propósito de implantar medidas para que los edificios sean cada vez más eficientes el uso de la energía.

En este sentido, la compañía apuesta por el desarrollo de edificios sostenibles, como el nuevo centro médico que se abrirá en Barcelona y que contará con la calificación energética A, la más eficiente, y una fachada vegetal cuyo uso en construcción tiene un doble efecto positivo: por un lado, ayudará a mantener la temperatura interna con menor necesidad de sistemas de climatización y, por otro, compensará hasta un 20% la emisión de CO2 del edificio gracias al efecto de la fotosíntesis realizada por las plantas de la fachada.