Los regantes temen que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico quiere aplicar de forma inmediata la rebaja en los caudales del Trasvase que este jueves ha aprobado la Comisión Central de Explotación del Acueducto. El presidente del Scrats, Lucas Jiménez, da por hecho que el Departamento de Teresa Ribera tratará de introducir la modificación por la vía rápida llevándola al Consejo de Ministros, a pesar de que los propios técnicos del Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (CEDEX), que han elaborado el informe sobre los recortes al Memorándum, proponen que se aplace su aplicación hasta que estén elaborados los nuevos planes de cuenca del Tajo y del Segura.

La Comisión Central de Explotación del Acueducto aprobó este jueves el informe del CEDEX que rebaja el volumen de los trasvases en el nivel 2 de 38 a 27 hectómetros cúbicos y eleva las reservas acumuladas en Entrepeñas y Buendía que marcan el nivel 1 de 1.200 a 1.400 hectómetros cúbicos, lo que supone en la práctica la desaparición del nivel máximo.

El presidente del Sindicato Central de Regantes del Trasvase, Lucas Jiménez, se lamento de que a medida que aumentan las reservas almacenadas en los embalses de cabecera, «será mayor la superficie de la lámina de agua expuesta a la evaporación. Eso provocará unas pérdidas de las que no se va a aprovechar nadie».

Lucas Jiménez reunirá el próximo martes a la Junta de Gobierno para analizar la decisión, que supondrá una pérdida de un 4% en los caudales trasvasados al Segura, según los cálculos recogidos en un informe del propio Scrats.

El estudio también alerta de que las aportaciones a la cabecera del Tajo se han reducido en más de 100 hectómetros cúbicos desde la puesta en marcha del Trasvase.

Entre las alternativas que estudiarían el martes los máximos responsables del Sindicato de Regantes figura incluso la posibilidad de recurrir el acuerdo de la Comisión Central de Explotación.

En caso de que no lleguen a recurrir, presentarán alegaciones pidiendo que se aplace la revisión hasta que se conozcan los nuevos planes hidrológicos de las cuencas del Segura y del Tajo.

Esta visión es compartida, según los agricultores, por el propio CEDEX, que lo expone en su documento. «Al no disponerse todavía siquiera de un borrador del nuevo plan que actualice la información con la que se elaboró la regla vigente, cualquier modificación de la regla será necesariamente parcial, pues solo podrá basarse en la actualización de la información hidrológica, sin poder disponer de la información actualizada sobre los usos del agua y requerimientos ambientales en la cabecera del Tajo», señalan los técnicos.