El apego de la empresa familiar a su pueblo de origen ayuda a evitar la despoblación de las zonas rurales al mantener el empleo. Esta es una de las conclusiones de la mesa redonda titulada 'La empresa familiar y su compromiso con las personas' celebrada durante la primera sesión del congreso, en la que participaron los presidentes de la Asociación de la Empresa Familiar de Aragón, Alfonso Sesé; de la Asociación Gallega de la Empresa Familiar, Víctor Nogueira; y de Cerealto Siro Foods, José Manuel González-Serna, que procede de Castilla y León.

González-Serna defendió la importancia de la empresa familiar como sustento del empleo en las zonas más despobladas y aseguró que «las ciudades no son las únicas que tienen industrias».

Los participantes explicaron que cuando salen fuera de España tienen graves problemas para encontrar personal formado dispuesto a trasladarse a las zonas más aisladas y concluyeron que «el talento» es fundamental para mantener el ritmo tecnológico que exige la economía actual.

Alfonso Sesé, el representante de Aragón, apuntó que en los próximos años las empresas van a necesitar profesionales diferentes, como «físicos o matemáticos», que sean capaces de incorporar la digitalización y la robotización precisa para seguir fabricando sus productos a precios competitivos. «Eso es lo que define el talento».

«Se contrata por el talento y se despide por el talante», sentenció el empresario de Castilla y León.

El presidente de las empresas familiares de Galicia se lamentaba de que «cuando los jóvenes se van a estudiar a Madrid o a Londres ya no quieren volver». Los contertulios reconocieron que en la mayoría de las comunidades autónomas se ha producido una dispersión de las universidades y existen numerosos campus que podrían concentrarse para ganar en eficiencia. «Con tres universidades y siete campus en Galicia hay una competencia por captar alumnos», apuntó Víctor Nogueira. Añadió que «la calidad de la educación varía muchísimo según donde se imparte».

Por su parte, González-Serna coincidió en que la dispersión universitaria le resta eficiencia, pero consideró que la existencia de campus también ayuda a mantener la población y a evitar que los jóvenes emigren. «No estoy orgulloso de que en Castilla y León haya siete universidades, pero no sé qué ocurriría si se concentraran», señaló.

Por otra parte, el presidente de Acciona, José Manuel Entrecanales, y la Alta Comisionada para la Agenda 2030, Cristina Gallach, que participaron en otro debate sobre 'Los objetivos de Desarrollo Sostenible como eje de la estrategia empresarial', coincidieron en la necesidad de orientar la actividad empresarial hacia las metas del acuerdo de París. Entrecanales destacó «la enorme oportunidad» que supone para las empresas adaptarse a la lucha contra el cambio climático y hacer suyos los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 , «no solo como salvaguarda del futuro, también como oportunidad de negocio». Cristina Gallach dijo que la transición energética es el reto actual más importante y señaló que «las políticas públicas no se pueden ejecutar con éxito si no es de la mano del sector empresarial».