La delegación de la AEMET en Valencia publicaba esta mañana las peores riadas del río Segura a lo largo de la historia, catalogando la de 2019 como la más catastrófica en los últimos 70 años. Así han explicado como se vivieron las peores riadas de la historia.

Climatológicamente el episodio de lluvias torrenciales en la Vega Baja del Segura es uno de los grandes episodios históricos de los que, con cierta recurrencia, pero sin una periodicidad fija, han asolado la comarca.

En diciembre de 2016 hubo precipitaciones muy fuertes o torrenciales y persistentes, pero el episodio de este mes de septiembre ha resultado más catastrófico. Os dejamos el mapa de acumulados en diciembre de 2016.

Habría que remontarse entonces al otro gran episodio de lluvias del siglo XX en la comarca, el de la histórica riada del 4 de noviembre de 1987. En el episodio de 1987 se acumuló en Orihuela 322.0, en San Miguel de Salinas 268.1, en Almoradí 249, 7 y en Pilar de la Horadada 206.5

Adjuntamos el mapa de la precipitación acumulada durante la riada de 1987, que estuvo insertada dentro del histórico episodio de lluvias de la Safor, cuando se registró la máxima precipitación en 24 en España: 817 l/m2 en Oliva.

En un análisis rápido, es probable que el episodio de 2019 esté superando en adversidad al de noviembre de 1987. Por lo que habría que retroceder más en el tiempo para buscar un episodio más adverso que el actual en la Vega Baja.

La riada del Segura más catastrófica de las conocidas ocurrió hace ahora 140 años. Es la llamada riada del día de Santa Teresa, del 15 de octubre de 1879.

La riada de 1879 causó gran impacto en la sociedad española de la época, ya que entre Murcia y Orihuela y otras localidades de la Vega Baja, hubo más de 1000 muertos. Tuvo un amplio eco en la prensa nacional e internacional e incluso desató una oleada de solidaridad internacional

Por los documentos que se elaboraron en la época, las crónicas y la enorme tragedia humana, pensamos que aquella riada del día de Santa Teresa tuvo una adversidad muy superior a la de 2019.

Pero el resumen sería que las lluvias de estos días en la Vega Baja Por los documentos que se elaboraron en la época, las crónicas y la enorme tragedia humana, pensamos que aquella riada del día de Santa Teresa tuvo una adversidad muy superior a la de 2019.

Según la "Memoria de la Junta de Senadores y Diputados creada por Real Decreto de 18 de Octubre de 1879 para la distribución de socorros a las comarcas inundadas de las provincias de Alicante, Almería y Murcia", el nivel del agua en algunas calles de Orihuela llegó a 3.8 m.

Tras la espantosa riada de Santa Teresa (1879), se puso en marcha el Proyecto de Obras de Defensa contra las Inundaciones en el Valle del Segura y se celebró en 1885 el Congreso contra las Inundaciones en el Levante Español . La finalidad no era otra que evitar los continuos desastres que ocasionaban las riadas en la cuenca del Segura.

Estas iniciativas contemplaban la construcción de presas por toda la cuenca del Segura, pero no en Santomera.

El 26 de septiembre de 1906, se produjo una crecida y posterior riada en rambla Salada que arrasó Santomera y ocasionó 31 muertes. Pese a la tragedia, en los sucesivos planes tampoco se contempló la construcción de una presa en Santomera.

El 29 de septiembre de 1947, tras una tremenda riada, Santomera quedó arrasada por las aguas. Más de 800 personas perdieron su casa y perdieron la vida 11 personas.

La catástrofe tuvo una repercusión mediática tremenda. Los principales diarios nacionales llevaban en portada la tragedia de Santomera. El periódico El Liberal (publicado diariamente en Madrid, Barcelona, Bilbao, Murcia y Sevilla) tituló: «Catástrofe en Santomera. Inundaciones. Muchos ahogados». La Verdad: «La inundación de Santomera reviste caracteres de verdadera catástrofe». Diario nacional sindicalista Linea: «Santomera arrasada por las aguas. Once muertos, tres desaparecidos y más de cien casas destruidas». La Vanguardia publicaba en portada: «Inundaciones en Murcia», con una foto a toda página.

Las riadas plasmadas en la pintura

Los efectos de la riada de 1879 impactaron tanto a la sociedad de la época, que sus efectos quedaron también plasmados en obras de arte, como la impactante obra de Muñoz Degrain que describe las consecuencias de las trágicas riadas del Segura de 1879.

El óleo "Episodio de la inundación de Murcia" 1892, forma parte de los fondos del Museo Nacional del Prado y está expuesto en el Museo de Zaragoza. Se puede ver una reproducción de la obra y su ficha en este enlace.

Antonio Muñoz Degrain, fecundo pintor valenciano de finales del XIX y principios del XX, estuvo fuertemente impactado por la trágica riada del Segura de 1879, también por la Valencia de 1897 y realizó varias obras con esta temática.

El conjunto es sobrecogedor. En el oleo se ve en segundo plano un grupo que representa a una madre sosteniendo a su hijo en alto intentando protegerlo de morir ahogado arrastrado por la riada.

El color ocre de las aguas cargadas de lodos y el dramatismo de la madre desesperada en medio de la riada, en una posición forzada, casi imposible, para darle mayor impacto emocional a la escena, nos trasladan a una de las furiosas inundaciones de las que se producen en tierras alicantinas, valencianas, castellonenses y murcianas con cierta recurrencia.