'Vida para el Medio Rural' es el título de la campaña presentada por el Partido Popular, en el que se proponen planes de empleo específicos, ayudas para el acceso y la rehabilitación de viviendas, el apoyo a la cultura y al patrimonio rural, impulsar el acceso a Internet en todos los núcleos de población o que todos ellos cuenten, al menos, con una tienda donde adquirir bienes básicos con el fin de «combatir el despoblamiento y mejorar la calidad de vida de sus habitantes».

El responsable de la campaña del PP regional y secretario regional de Comercio, Francisco Abril, anunció que «recorreremos palmo a palmo la Región con el fin de dar a conocer las medidas en las que va a trabajar el PP para combatir el despoblamiento rural y que servirán para su modernización, para mejorar la calidad de vida de los habitantes de estas zonas y así consolidar su permanencia en el territorio».

El dirigente popular subrayó que «sensibilizar a la sociedad sobre la importancia del medio rural en nuestra Región y fomentar con acciones informativas, formativas, comunicativas poniendo en valor el medio rural es objetivo prioritario para el PP».

Menos trabas

Menos trabasEn la hoja de ruta establecida para «apoyar las zonas rurales» se encuentra el impulso de la Ley del Medio Rural, que recogerá, entre otras, medidas como «la eliminación de trabas para la instalación de negocios, comercios y empresas en el medio rural, incentivos fiscales y bajada de impuestos para aquellos que decidan instalar su residencia o empresa en zonas rurales».

Entre los territorios rurales más vulnerables al despoblamiento, según un informe del Consejo Económico y Social (CES), se encuentran Aledo, Moratalla, Ojós, Ricote y Ulea, aunque el riesgo se extiende a otros municipios mayores que cuentan con núcleos rurales o pedanías como zonas de montaña en Caravaca de la Cruz, pedanías altas de Lorca (Zarcilla de Ramos, Aviles o Coy) y aldeas rurales de Abanilla, Albudeite, Campos del Río, Cehegín, Abarán, Bullas y Cieza.

Abril destacó que este riesgo no se circunscribe solo a municipios muy pequeños» sino también a núcleos o pedanías diseminadas. En los últimos años, lamentó, «se está perdiendo un número importante de habitantes», lo que genera también «un problema medioambiental» en una tierra en la que «el desierto va ganando terreno».

El 'popular' reconoció que cuando un núcleo empieza a despoblarse «se genera menos empleo y menos riqueza, y que los servicios son menores».

Por ello, dijo, «tenemos que intentar darle la vuelta a este problema» con medidas transversales encaminadas a que la renta o los servicios disponibles «no tengan que ver con la zona en la que uno vive».