Ya son trece los recursos contra trasvases del Tajo al Segura que ha perdido el Gobierno de Castilla-La Mancha desde el año 2016, una actividad que supone hasta ahora 60.000 euros de gastos sólo en las costas judiciales, y que van a tener que abonar las arcas castellano-manchegas.

"Este está siendo el resultado de esa actividad febril de recurrir todos los envíos de agua hacia el Levante, y que desconocen en la comunidad vecina", ha manifestado esta mañana el presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, Lucas Jiménez, quien ha hecho un balance del pasado año hidrológico 2017-2018 y del comienzo del actual 2018-2019. Las sentencias de los recursos, "que siguen presentando a sabiendas de que los van a perder", han sido a su vez recurridas al tribunal de Casación.

Jiménez ha comentado que el año que acabó el pasado 30 de septiembre ha sido "bastante malo y que hubiera sido nefasto" si en marzo y abril no se hubieran incrementado las reservas en cabecera del Tajo y en la cuenca del Segura a raiz de las continuas lluvias de la primavera pasada. De hecho, el Trasvase estuvo cerrado durante los once meses anteriores a causa de la sequía.

En cuanto al posible fin del Trasvase, el presidente del Scrats ha indicado que lo considera "intocable por su propia naturaleza", recordando que de él se abastecen poblaciones albaceteñas e incluso regadíos de esa zona. Su continuidad se defiende "por su propia esencia".

Sin embargo, sí ha considerado preocupante la reciente actitud del Ministerio para la Transición Ecológica con el último envío del mes de noviembre, en el que sólo autorizó agua para el abastecimiento (7,5 hm3) y nada para el regadío, "habiendo agua suficiente".

Al respecto, ha afirmado que la decisión de no trasvasar no tiene precedentes y es gravísima, al tiempo que se sorprendió que a día de hoy la Comisión Central de Explotación del Trasvase todavía no ha dado a conocer ni el acta de esa reunión ni los informes que sirvieron de base para decir que no se podían trasvasar 12,5 hectómetros al regadío con "el argumento peregrino" de las lluvias caídas en el Levante ese mes y a unos daños en el canal del Campo de Cartagena ocasionados por esas lluvias.

Jiménez ha insistido en que lo que necesitan los regantes es seguridad y no estar sujetos a ningún vaivén, ya que llevan muchos años "engañados por distintas administraciones".

El Sindicato ha anunciado que está organizando para marzo del año próximo la celebración del 40 aniversario del Trasvase Tajo-Segura, fecha en la que tendrán lugar diversos actos conmemorativos en Almería, Alicante y Murcia.