El II Foro Social de Mujeres y Niñas con Discapacidad organizado por el Comité de Representantes de Personas con Discapacidad y sus Familias (Cermi), inaugurado en la mañana de ayer, buscará ser un espacio de diálogo e intercambio de experiencias relevantes vinculadas con la situación de las mujeres y niñas.

Por la tarde, la plaza Cardenal Belluga acogió la lectura del manifiesto 'Juntas construyendo el presente, proyectando el futuro', para conmemorar el Día Internacional contra la Violencia de Género, al que asistió la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Violante Tomás.

En la inauguración del foro, la consejera de Familia dijo que «las mujeres con discapacidad sufren a menudo un doble ataque a sus derechos, por lo que deben hacer un doble esfuerzo y ser doblemente valientes para luchar por ellos». Y agregó: «Aunque la sociedad ha sufrido una enorme transformación en sensibilización y calidad asistencial, no debemos bajar la guardia y poner siempre los derechos de las personas con discapacidad en el foco de nuestras políticas», según citan fuentes del Gobierno regional en un comunicado.

Además, este foro se ha adherido a la campaña de denuncia del acoso #MeToo, y habilitó una sala en la que cualquier participante de las jornadas puede dar su testimonio personal y formar parte de una campaña audiovisual para denunciar la violencia contra la mujer.

La conferencia marco del foro fue ofrecida por Ana Peláez, vicepresidenta ejecutiva de la Fundación Cermi Mujeres y primera mujer con discapacidad miembro del Comité de Naciones Unidas. Peláez repasó los principales tratados internacionales que deben cumplirse para proteger los derechos de las mujeres y niñas con discapacidad, como la Convención Internacional de los Derechos de las personas con Discapacidad o la Convención para la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer.