La comunidad autónoma pondrá en marcha un plan a diez años para descontaminar y recuperar los suelos contaminados por la actividad minera, con especial incidencia en la recuperación de los 29 depósitos mineros catalogados a nivel nacional, para lo que se prevén inversiones público-privadas por valor de 84,8 millones de euros.

El consejero de Empleo, Universidades, Empresa y Medio Ambiente, Javier Celdrán, ha presentado hoy en el Consejo de Gobierno ese Plan de Recuperación Ambiental de Suelos Afectados por la Minería (PRASAM), que contempla 30 medidas concretas, algunas de las cuales ya están en ejecución, articuladas en torno a cuatro objetivos.

Así, el primer objetivo es impulsar el conocimiento y mejora en la gestión de zonas mineras, para lo que se articulan 14 medidas, mientras que otras seis acciones van encaminadas a la difusión de información y promoción de la sensibilización de la sociedad sobre la situación de esos emplazamientos.

Un tercer objetivo es el de la prevención, con dos medidas más y, por último, impulsar la recuperación ambiental de las áreas afectadas, lo que tendrá unos costes estimados de 82 millones de euros.

Celdrán ha recordado que la mayoría de estos terrenos contaminados por estériles son propiedades privadas y, por tanto, son sus titulares los que deben responsabilizarse de su descontaminación, y la comunidad autónoma actuará por responsabilidad subsidiaria en esa descontaminación requiriendo luego los costes a los propietarios.

Para llevar a cabo estas tareas, el consejero ha destacado que se utilizará la misma metodología que se ha empleado en la descontaminación del Mar Menor, por lo que el Gobierno está trabajando ya en un decreto ley de medias urgentes para priorizar las actuaciones a llevar a cabo, minimizar posibles riesgos y ejecutar de manera inmediata las más urgentes, y también para simplificar los trámites administrativos a la hora de pedir responsabilidades a los propietarios.

En cualquier caso, una decena de medidas de este plan ya están en ejecución o se han llevado a cabo, como la redacción de un informe con todas las investigaciones y estudios científicos elaborados hasta el momento y el impulso a nuevos estudios para complementar los ya existentes.

Están en marcha diversos estudios sobre la contaminación natural y por acción humana de metales pesados en las zonas afectadas, un inventario de suelos contaminados, estudios sobre la presencia de metales en el aire en la población cartagenera de Llano del Beal y también una investigación epidemiológica en esa localidad y en otras como Portmán, El Estrecho, La Aljorra, El Albujón, Pozo Estrecho y La Palma.

Celdrán ha señalado que las actuaciones más urgentes son las que se localizan en la zona central de la Sierra Minera de Cartagena y La Unión, pero también en Mazarrón se han llevado a cabo ya algunas medidas de urgencia como el sellado de la balsa "San Cristobal II", que tenía daños estructurales.

También siguiendo el modelo de recuperación del Mar Menor, se van a crear un Comité de Asesoramiento Científico y otro de Participación Social.

El primero de ellos, ha indicado el consejero, contará con expertos en descontaminación de suelos mineros no solo de la Región de Murcia, sino también de otras comunidades autónomas que han vivido problemas similares, como Castilla y León o Asturias.

Las 30 actuaciones previstas en el plan, a desarrollar hasta 2028, están orientadas a la recuperación ambiental de los 29 depósitos mineros que hay en Cartagena, La Unión y Mazarrón y que han sido catalogados por el Instituto Geológico y Minero de España en su inventario sobre gestión de residuos mineros y rehabilitación de esos espacios.

No obstante, Celdrán ha recordado que en la Región hay un total de 82 depósitos mineros, pues esa actividad se desarrolló también, aunque en menor medida, en los municipios de Cehegín y Águilas.