El anterior presidente de la FREMM, Juan Antonio Muñoz, que el pasado mes de julio anunció por sorpresa su dimisión, ha permanecido once años en el puesto. A pesar de que su presidencia ha estado marcada por la crisis, Muñoz ha ampliado los servicios que ofrece la patronal del Metal y ha construido el nuevo centro de negocios, que también ha permitido ampliar el centro de formación con la incorporación de más aulas y talleres en los que se imparten las nuevas especialidades profesionales que demandan las empresas, como la domótica, junto con los oficios tradicionales. También apostó por ayudar a las empresas a salir al exterior.

Juan Antonio Muñoz se ha marchado con la satisfacción de que no ha tenido que hacer ningún ERE ni los recortes de plantilla a los que se vieron abocadas otras organizaciones, aunque los trabajadores de la FREMM tuvieron el sueldo congelado durante cinco años. Reconoce que fue especialmente duro asumir la dirección en solitario tras el fallecimiento del secretario general, Arsenio Sánchez, desaparecido en febrero de 2013. Por eso consideró necesario presentarse a la reelección hace tres años, afrontando el primer proceso electoral vivido en la FREMM, que le llevó a recorrer todos los municipios de la Región para visitar a las empresas asociadas una a una. Entendió que su ciclo se había cumplido tras la celebración del 40º aniversario, que se conmemoró el pasado mes de mayo, bajo el lema ´La fuerza de la unión´.

El anterior presidente se ha ido «con el deber cumplido y la conciencia tranquila», satisfecho de haber podido mantener la independencia económica de la FREMM durante los años críticos de la recesión, a pesar de «no haber recibido ninguna subvención», y de no haberse inmiscuido nunca en las elecciones de 45 los gremios que la integran.