El Hospital Clínico Universitario Virgen de la Arrixaca del Área de Salud I-Murcia Oeste, dependiente del Servicio Murciano de Salud (SMS) de la consejería de Sanidad, está desarrollando un proyecto de investigación para obtener más información sobre las células tumorales en niños. Se está financiando gracias a la colaboración con la Fundación Pablo Ugarte, dedicada al fomento de la investigación en cáncer pediátrico y que, en la actualidad, sufraga 16 proyectos en toda España.
La investigación se está llevando a cabo entre la Sección de Oncohematología Pediátrica de la Arrixaca y los servicios de Inmunología y Hematología para estudiar con detalle la interacción entre la célula tumoral y los linfocitos NK del paciente y también de los donantes, en aquellos casos en los que se recurre al trasplante de médula ósea.
En este sentido, la consejera de Sanidad, Encarna Guillén, valoró la colaboración de la Asociación Pablo Ugarte y destacó «la relevancia» de esta investigación debido al papel que juegan los linfocitos NK en el sistema inmunológico y, por tanto, en la defensa frente al cáncer.
La investigación es el camino, según precisó Guillén, «para poder obtener más información sobre esta enfermedad, sobre su posible abordaje y sobre la detección precoz». En este sentido, la consejera hizo alusión a los estudios genéticos que se hacen en la Región para detectar síndromes hereditarios que predisponen al paciente a sufrir esta enfermedad.
La detección de un síndrome genético de predisposición al cáncer es «muy importante», porque permite aplicar un protocolo de seguimiento y un diagnóstico precoz específico para cada caso. Sin embargo, estos pacientes son una minoría, ya que representan menos del cinco por ciento de todos los casos. La investigación también es una plataforma para avanzar e innovar en los tratamientos. De este modo, la Unidad de Trasplante Hematopoyético y Terapia Celulara ha investigado sobre estrategias de terapia celular como el trasplante 'haploidéntico'.
Otros recursos
La consejería de Sanidad cuenta con una Unidad de Salud Medioambiental Pediátrica. Recientemente, ambos departamentos han puesto en marcha la Unidad de Largo Seguimiento de Supervivientes de Cáncer Pediátrico.
Este proyecto tiene como prioridad mejorar la calidad ambiental y de vida, el cribado y detección precoz de enfermedades crónicas, así como disminuir la 'morbimortalidad' de estos pacientes. De este modo, se ofrece a los pacientes un recurso asistencial coordinado entre Atención Primaria y Especializada para garantizar el correcto seguimiento y ofrecerles mejores opciones diagnósticas, terapéuticas y preventivas que les ayuden a crecer de forma saludable.
Asimismo, a finales del pasado año se publicó la Guía de Detección Temprana de Cáncer en Niños y Adolescentes, con la que se persigue informar a pediatras y padres sobre posibles síntomas de alarma como consecuencia de la enfermedad.
