El Círculo de Economía aprobó ayer un documento en el que reclama a la Comunidad Autónoma un mayor esfuerzo en promoción exterior y una apuesta por la marca regional. Plantea también la necesidad de planificar el futuro del turismo regional con iniciativas capaces de atraer visitantes a la Región, en lugar de seguir apostando por «proyectos emblemáticos» del anterior Gobierno, como el de la Paramount, cuya viabilidad pone en duda, a la vista de las dificultades que están encontrando los parques temáticos ya existentes.

«Admitiendo que un proyecto de esta envergadura sería beneficioso para todos en términos económicos y de empleo, no está demostrado que lo pudiera ser, significativamente y a corto plazo, en atracción de visitantes del exterior de la Región. Por todos estos motivos, se impone planificar nuestro futuro sin centrarlo en los denominados ´proyectos emblemáticos´», plantea la organización constituida por directivos de la Región, que preside Bruno Dureux.

El Círculo destaca igualmente las dificultades que ha encontrado el proyecto de Marina de Cope, que contemplaba un gran complejo turístico en un espacio protegido de la costa entre Águilas y Lorca, paralizado tras una sentencia del Constitucional porque ocupaba terrenos dentro de un parque natural.

En este caso, el Círculo señala que estos planes urbanísticos «exigen también un grado de inversión privada muy alto, y no parece que el empresariado, ni las entidades financieras se muestren muy proclives a financiar un proyecto de tal magnitud que, además, se ha visto sujeto a serios problemas de inseguridad jurídica». En esta situación se pregunta «por qué la iniciativa privada no encuentra suficientes incentivos para invertir más en el sector turístico en nuestra región »y recuerda que el hecho de que Murcia solo cuente con dos hoteles de cinco estrellas demuestra que «son muy pocas las enseñas hoteleras nacionales o internacionales que han elegido Murcia para establecerse».

En esta situación, considera que «lo más razonable, realista y aconsejable es fijarnos en los modelos que funcionan en el resto del país. Existen áreas que han mejorado su oferta turística potenciando una importante oferta cultural diferenciada o elevando el atractivo de la zona abriendo centros comerciales modernos e innovadores en los lugares más adecuados».

Como ejemplo a seguir se refieren a «las zonas que han reconvertido su modelo hacia un turismo de mejor calidad y han conseguido atraer a un turista de mayor nivel de gasto», detalla en el documento. Cuestionan también la utilidad del aparato burocrático de la Administración y plantean que «la estructura administrativa sin presupuesto para gestionar sus competencias» no tiene utilidad. Por el contrario, «echa en falta una decidida apuesta por la promoción.

El grueso de la promoción turística exterior de la región debería coordinarse desde el Instituto de Turismo de la Región, que ha de tener en cuenta la oferta diferenciada de los ayuntamientos a partir de una misma imagen de marca regional». Pese a las penurias, valora el esfuerzo presupuestario para 2016.

Por otra parte tacha de «excesiva y desproporcionada presión fiscal» y alerta contra «la excesiva tolerancia pública frente al intrusismo y frente a los establecimientos alegales, o claramente ilegales».