La vicepresidenta segunda y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, aseguró ayer que el Ministerio autorizará todas las peticiones que hagan las comunidades autónomas para refinanciar los vencimientos de su deuda en 2011, tal y como ocurrirá con Cataluña, lo que no supone un aumento de la deuda. Salgado dejó claro que a Murcia y a Castilla-La Mancha no se le autorizarán nuevas emisiones hasta que cumplan los ajusten que se les han exigido, pero sí la refinanciación de los vencimientos.

Por su parte, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, dijo ayer en el Congreso que la polémica suscitada tras la entrevista que mantuvo en la Moncloa con el presidente catalán, Artur Mas, es un debate «ficticio», que ha generado una confusión «con alguna intención». Zapatero precisó que el Gobierno catalán, como otros, presentó un plan de consolidación fiscal en el ministerio de Economía el pasado 30 de enero y ahora tiene que «desagregarlo» y «concretarlo». Precisó que Cataluña «tendrá autorizaciones de deuda» igual que todas

las comunidades que cumplan con el déficit, establecido en el 1,3% del PIB en 2011. «Así de sencillo», concluyó.

En declaraciones a RNE, Salgado anunció que el Ministerio ya tiene sobre la mesa las autorizaciones para emisiones destinadas a refinanciar deuda en Andalucía, Galicia, Madrid y Valencia, y que las hará efectivas cuando finalicen los trámites correspondientes. Lo mismo ocurrirá con Cataluña, cuando presente su petición. La vicepresidenta económica explicó que el Gobierno siempre autoriza estas emisiones porque no

suponen un aumento del volumen general de la deuda, sino que simplemente se hacen para ampliar los plazos vencimiento.

De hecho, recordó que en 2010 todas las comunidades autónomas solicitaron emisiones para refinanciar los vencimientos de su deuda y que el Ministerio autorizó las 17 peticiones. Sin embargo, Economía no autorizará nuevas emisiones a aquellas comunidades que no estén cumpliendo con los objetivos de déficit hasta que presenten sus planes de reequilibrio y obtengan el visto bueno del Gobierno. Éste es el caso de Murcia, Cataluña y Castilla-La Mancha. Con todo, Salgado negó que el Ejecutivo esté tratando a Cataluña como «una excepción» y que el Gobierno haya rectificado tras el revuelo que ha generado la reunión que mantuvo el presidente Rodríguez Zapatero, con el presidente de la Generalitat.