José Ramón Carabante, el empresario que hace dos años compró a Trinitario Casanova el grupo Hispania, con sede en la plaza Fuensanta de Murcia, negó ayer que esté "rozando la quiebra" y anunció que esta misma semana firmará un acuerdo con el Banco Popular para refinanciar su deuda con la entidad que, según publicaba 'El Mundo' este fin de semana, ascendería a 450 millones de euros. Carabante desmiente que deba tanto dinero y sostiene que "es absurdo" hablar de una cifra tan alta. "Estoy con ellos a partir de un piñón. El Popular está con nosotros al 100%", aseguró.

El promotor del equipo de Fórmula 1 Hispania Racing Team desmintió que su situación financiera esté en una situación crítica, tal como se ha rumoreado en las últimas semanas, y se mostró convencido de que se le está atribuyendo parte de la deuda que tiene pendiente Trinitario Casanova, el anterior presidente del grupo Hispania y promotor de la urbanización La Zerrichera de Águilas. A su juicio, la prueba de que las informaciones difundidas sobre su situación financiera no se corresponden con la realidad, es que "incluso me atribuyen acciones del Popular que no tengo". Carabante también negó que haya llegado a acumular una fortuna de 1.000 millones y destacó "la cifra astronómica que representa esa cantidad traducida a pesetas".