La autovía, que tuvo un presupuesto de ejecución de más de nueve millones de euros, supondrá la conexión de un 'cinturón' de autovías, uniendo la autovía RM2, que a su vez comunica la A-7 y la A-30 con la autovía que va de Mazarrón a Totana, de forma que el Gobierno regional completó parte de lo previsto en el plan de vertebración de la Región de Murcia.

Con esta nueva vía, y después de abrir al tráfico hace casi un año la autovía Totana-Mazarrón, el trayecto Alhama-Mazarrón a través de la MU-603, que era de 48 minutos, se reducirá hasta 21,5 minutos, con lo que se ahorran 26,5 minutos en este desplazamiento, según informaron fuentes del Ejecutivo autonómico en un comunicado.

Al respecto, Ballesta, señaló que la nueva infraestructura, ejecutada por la Consejería a través de la Dirección General de Transportes y Carreteras, "proporciona un importante aumento de la movilidad en la Región, ya que reduce significativamente el tiempo de los desplazamientos entre los municipios que conforman la Comarca del Bajo Guadalentín".

De esta manera, los habitantes de Alhama de Murcia, Librilla, Mazarrón y Totana, poblaciones que suman un total de 84.732 habitantes, "verán mejoradas significativamente sus comunicaciones, al igual que el resto de conductores que circulan habitualmente por estas vías", según el comunicado.

Asimsimo, Ballesta manifestó también que "con esta nueva autovía, además de aumentar la fluidez del tráfico en la zona, se refuerza la seguridad vial y permitirá reducir notablemente los índices de siniestralidad", y recordó que "la autovía cuenta con la declaración de impacto ambiental favorable, puesto que respeta el espacio de paso de aves y los humedales colindantes".

CARACTERÍSTICAS.

La nueva vía tendrá una longitud de 9,1 kilómetros y dispondrá de dos enlaces que permiten acceder a la autovía y dan continuidad al resto de vías del municipio de Alhama. Las dimensiones serán de 10,50 metros de anchura total, incluyendo dos carriles de 3,50 metros, un arcén exterior de 2,50 metros y otro interior de un metro, con una mediana entre calzadas de dos metros.

En el estudio de tráfico previsto para la carretera, el cálculo realizado sobre los niveles de servicio existentes en la actualidad y los de un horizonte de 20 años indican que se comenzará atendiendo los 6.000 vehículos de Intensidad Media Diaria (IMD) actual hasta los 40.000 que están previstos para 2027.

Por otro lado, dado que la IMD de vehículos pesados es de 700 al día, y que se prevé que ésta aumente hasta los 900, se han realizado también las obras de seguridad necesarias (barreras de defensa) para garantizar la seguridad de los usuarios de la vía.