Economía

Crédito de 18,7 millones de euros para garantizar las inversiones en Cartagena

El Gobierno local justifica el préstamo para poder sellar un vaso del vertedero del Gorguel, pagar deuda y no subir impuestos

La oposición critica la «nefasta gestión económica» del Ejecutivo

Sesión plenaria del Ayuntamiento de Cartagena

Sesión plenaria del Ayuntamiento de Cartagena / A. C.

El Gobierno local aprobó ayer un préstamo de 18,7 millones de euros «para saldar deudas y garantizar inversiones municipales sin subir los impuestos a los cartageneros». Así lo anunció el portavoz del Ejecutivo, Ignacio Jáudenes, tras la Comisión de Hacienda donde se trató el asunto fuera del orden del día.

El edil, que además es concejal de Hacienda, explicó que «los créditos nos servirán para abordar nuestra obligación de sellar el vaso del vertedero del Gorguel que ya se ha completado». «Impedirá problemas ambientales y nos permitirá obtener ingresos a través de la generación de biogás», indicó Jáudenes. Para este proyecto, el Gobierno local solicitará un crédito de 7,3 millones que devolverá en ocho años, que es el tiempo que queda al contrato municipal de limpieza».

El resto del dinero se obtendrá a través de «un préstamo de legislatura que nos va a permitir eliminar del presupuesto del año que viene la carga de déficits generados en algunos servicios», dijo el edil. En concreto, se dejará a cero la deuda acumulada por la gestión de Puerto de Culturas, se pagará el incremento de horas extraordinarias que se generaron antes de que entrasen los nuevos policías locales en servicio, se cubrirá el billete social deportivo y también los casi 1,8 millones para subvencionar el transporte público.

Jáudenes justificó que «estos déficits se cubren habitualmente con el remanente de tesorería del año siguiente, pero en este caso lo cubriremos con un préstamo y así el presupuesto estará dispuesto para atender las inversiones y los proyectos municipales».

El concejal de Hacienda también precisó que los préstamos aportarán el dinero suficiente para evitar el impacto de los tres millones de euros de revisiones de precios del servicio de limpieza que dependen una decisión judicial; al igual que la deuda de 2,2 millones del nuevo impuesto que ha establecido el Gobierno central para el compostaje.

La propuesta de petición de ambos préstamos contó con los votos a favor de PP y VOX; y el voto en contra de MC, PSOE y Sí Cartagena.

Y es que, la oposición en bloque criticó la «nefasta gestión económica» del Ejecutivo local. Desde la formación cartagenerista, la concejala Isabel García criticó que se trata de una medida presupuestaria que contrasta con la estabilidad que anunciaba a bombo y platillo la alcaldesa, gracias a la entrada de Vox en el Gobierno. García recordó que «estos nuevos préstamos vienen a sumarse al que ya se solicitó para la elaboración del actual presupuesto de 8,5 millones».

Por su parte, el portavoz del PSOE, Manuel Torres, criticó duramente «el nuevo endeudamiento» aprobado por la Comisión de Hacienda. «La gestión económica de la alcaldesa Noelia Arroyo es nefasta», dijo Torres, quien recordó que «hace unas semanas se aprobaban unas ordenanzas fiscales que bajaban los impuestos y ahora se aprueba un préstamo de 19 millones de euros porque las cuentas municipales no salen». «Al final, con la gestión del PP, el endeudamiento por cartagenero será de 337 euros, teniendo en cuenta las deudas financiera y comercial», indicó el socialista, quien insistió en que «siempre salen perdiendo los ciudadanos».

Torres acusó a la alcaldesa de parecerse «cada vez más a Pilar Barreiro, que dejó el Ayuntamiento intervenido». «Su discípula va camino de aventajarla porque desde que llegó a la Alcaldía ha subido la deuda del Ayuntamiento un 60%».

Para la portavoz de Sí Cartagena, Ana Belén Castejón, «lo preocupante es que la deuda va a crecer para seguir pagando hipotecas como la de Lhicarsa y sin que la deuda contraída redunde en generación de riqueza y empleo». Según Castejón, «esto viene a demostrar que el pacto de Gobierno entre el PP y Vox no pretendía dar estabilidad al municipio, ni había un bloqueo institucional, simplemente Arroyo necesitaba a cuatro concejales dispuestos a todo a cambio de entrar en el Gobierno».