Sonrisas y lágrimas en una jornada en la que el Senado Romano toma el mando

El primer domingo de fiestas comenzará con uno de los actos imprescindibles, el Dies Lustricus, una celebración infantil romana en la que los festeros presentan a los nuevos miembros de Tropas y Legiones nacidos este año para que sean consagrados.

La Destrucción de Sagunto es otro de los eventos que más público suele congregar, ya que representa la toma y destrucción de la ciudad a manos de los soldados carthagineses, lo que supone el casus belli de la Segunda Guerra Púnica.

Se trata de uno de los momentos más tensos y dramáticos de toda la programación prevista para estos días, y tendrá como escenario la explanada del Puerto, y de nuevo esas renovadas instalaciones que este año permiten albergar a mucho más público que en ediciones anteriores.

La Roma más burlona

Una vez finalizado el emotivo acto de la destrucción, llega el momento, en torno a las 21.30 horas, de un momento más distendido y divertido a través de la ansiada sesión plenaria del Senado Romano, en el que se escenifica, con un tono humorístico, el encuentro que dará paso a la declaración de guerra.

Los senadores realizan todo tipo de comentarios, exponiendo chismes festeros y políticos que han tenido lugar en la ciudad en el último año, con un toque satírico que se gana la carcajada del público año tras año.

Finalizados estos tres actos históricos, carthagineses y romanos se darán cita de nuevo en la sede del campamento festero para continuar su actividad interna con enlaces matrimoninales, concursos, investiduras, degustaciones varias, juramentos e incluso música en directo.