Aforca quiere que Telefónica restaure el Castillo de San Julián

La Asociación de Amigos Veteranos de los Castillos, Fortalezas, Murallas, Torres y Baterías de Cartagena (Aforca) quiere hacer un frente institucional para que Telefónica restaure el Castillo de San Julián. La compañía adquirió este inmueble protegido como BIC en el año 1995, ya que utiliza el mismo como base de sus distintas antenas de telecomunicaciones. Aforca ha remitido sendos escritos al Ayuntamiento de Cartagena y a la Comunidad Autónoma para que ambas administraciones demanden estos arreglos formalmente a la multinacional.

La asociación considera que «muy probablemente», San Julián solo sea una propiedad más de las muchas que posee Telefónica; por lo que considera que su conservación como monumento no sea una de sus prioridades, de no ser porque la Administración local o autonómica llame la atención sobre este aspecto.

Por otra parte, este colectivo que protege el patrimonio militar sostiene que la multinacional cuenta con la Fundación Telefónica, que dedica parte de sus beneficios en pro de la cultura y otros fines sociales. No obstante, LA OPINIÓN contactó ayer con el departamento de comunicación de esta sección de la compañía, desde donde apuntaron que, normalmente, la Fundación no suele destinar fondos a este tipo de intervenciones.

Sin embargo, desde el Ayuntamiento de Cartagena desvelan que un arquitecto de la multinacional estuvo reunido el año pasado con técnicos municipales para ver el posible proyecto de rehabilitación de esta fortificación militar. Igualmente, la Administración local apunta que le prestaron toda la ayuda necesaria al emisario de Telefónica, al que le hicieron algunas recomendaciones a seguir de cara al futuro proyecto de rehabilitación. Por último, el concejal de Patrimonio, David Martínez, destaca que «vamos a volver a ponernos en contacto con la compañía para tratar de conocer cuándo tienen previsto acometer los trabajos».

Aforca requiere que se efectúe una intervención en las partes más degradadas y que amenazan con el derrumbe de la fortaleza. Se trata de la entrada falsa y los locales de polvorines edificados que fueron reconstruidos tras la grave explosión que sufrió esta fortaleza en mayo de 1898. «Sería más que justa esta inversión a cambio de la dudosa utilización que hace Telefónica de este patrimonio BIC invadido por un enjambre de antenas y sistemas de telecomunicaciones», comenta Aforca. El colectivo tiene este inmueble dentro de su lista roja de patrimonio.

Precisamente, la Comunidad Autónoma informa de que la Dirección General de Bienes Culturales lleva desde hace tiempo haciendo un seguimiento a las antenas de telefonía que hay en el Castillo de San Julián. La Administración regional cuenta que la instalación de antenas en castillos era algo habitual en tiempos pasados, por tratarse de lugares de altura. No obstante, en la Región ya hay casos que se han resuelto satisfactoriamente gracias a la intervención de la Comunidad, como el del Castillo de Lorca, de donde ya se eliminaron las antenas.

Según la Comunidad, en el caso de San Julián, se han mantenido diferentes reuniones para buscar una solución, ya que no se puede obligar a quitarlas sin que haya una alternativa, porque perjudicaría a la población. Es por ello que los técnicos autonómicos tienen previsto mantener una cita próximamente para ver los avances y conocer la hoja de ruta para el proyecto de nuevo emplazamiento de antenas. De no ser así, concluyen desde la Administración regional, se adoptarán las medidas que la ley permite.