Critican que las medidas de seguridad en el centro restan ventas al comercio

Los comerciantes del Centro Comercial Abierto de Cartagena (CCA) mostraron su preocupación por dos frentes que han tocado de lleno a la sociedad española en los últimos tiempos. El terrorismo y el problema catalán tienen en vilo a muchos comerciantes. Y es que, las medidas de seguridad tomadas en el centro de Cartagena tras los atentados en las ramblas de Barcelona, que se cobraron la vida de 16 personas y provocaron más de 120 heridos, han restado dinamización al centro de Cartagena lastrando al pequeño comercio, según afirmó el presidente del CCA, Antonio Sánchez.

«Para mejorar el comercio en el centro de la ciudad lo primero que habría que hacer, de momento, es buscar soluciones para no poner coches y maceteros en las calles, por ejemplo», denunció Sánchez sobre los últimos cambios para aumentar la seguridad.

En este sentido, el presidente del CCA pidió soluciones que resten sensación de alarma.«Soluciones para volver a darle dinamización al centro, por lo menos que haya carga y descarga normalizada, unos servicios normalizados...», denunció.

Y es que el presidente de la asociación de comerciantes se mostró especialmente preocupado por el efecto que los últimos acontecimientos sucedidos en Cataluña están teniendo en el resto de España, y en concreto en Cartagena.

Desde el pasado mes de agosto, a raíz de los atentados, muchas calles de la ciudad tienen colocados en ambos extremos maceteros o coches policiales, de forma que no puedan circular camiones o furgonetas como las que atropellaron en las ramblas de Barcelona. «Esperamos que ese capítulo, si todo va bien, para el año que viene esté solucionado», afirmó Sánchez.

El presidente del CCA también denunció el boicot que muchos clientes realizan a productos de procedencia catalana. «Ahora estamos viviendo unos momentos muy convulsos donde vienen personas y miran la procedencia del producto y, si es catalán, no lo compran? Así de claro. Entonces se están viviendo momentos de mucha incertidumbre», declaró.

Sánchez recordó que lo que sucede en Cataluña no sólo afecta a esa comunidad autónoma sino que tiene repercusión en el resto de España. «Con el conflicto catalán hay un movimiento allí pero también otro en el resto de España. Entonces nos afecta a todos. Al final saldremos seguro. En cuanto las cabezas locas se vayan de donde están... Verás como salimos», afirmó esperanzado.

«Nos toca seguir trabajando»

Sánchez explicó que su preocupación está motivada porque en su sector (regenta una ferretería) hay muchos fabricantes, «y muy buenos», de procedencia catalana. «Estos fabricantes seguro que van a sufrir las consecuencias», afirmó.

No obstante, desde el CCA tienen claro que «al final lo que nos toca es seguir trabajando en lo nuestro. En el pequeño comercio, en seguir haciendo cosas que nos incremente el flujo de gente que sobre todo visiten el centro», declaró.

Pese a los últimos acontecimientos, Sánchez señaló que este verano el comercio no se ha visto afectado demasiado, ya que registraron, «más o menos», los resultados del verano de 2016.

Aunque la recuperación económica parece que sigue su curso, acontecimientos como el conflicto catalán lastran unos números que en el pequeño comercio sigue sin despegar.

Colapso Los turistas y los coches policiales llenan las calles

La llegada de más de 4.000 turistas a la ciudad provocó ayer que se dieran imágenes curiosas en algunas calles del centro de Cartagena. La masiva presencia de turistas en muchas arterias provocó que alrededor de coches de la policía se dieran situaciones de colapso. La presencia de los vehículos en los extremos de algunas vías viene motivada por el reforzamiento del nivel 4 de alerta antiterrorista decretado por el Gobierno de España ante los ataques sufridos en las Ramblas de Barcelona y otras localidades de Cataluña. Por el momento, se siguen estudiando distintas fórmulas que eviten la sensación de cierta alarma, pero hasta que se tomen nuevas decisiones, se ha creído conveniente la colocación de coches policiales y de maceteros que eviten que por distintas calles, como Mayor o Carmen, puedan circular vehículos y así evitar atentados. La afluencia de turistas estuvo provocada ayer por la doble escala de los cruceros Ocean Majesty y Freedom of the Seas.