La plaza San Francisco, conocida como la Glorieta, acogió ayer un homenaje a la figura de Isidoro Máiquez, frente a la estatua dedicada al actor cartagenero del siglo XVIII. Se llevó a cabo una lectura en la que se rememoraron los eventos más importantes de su vida y obra. Además, se depositó una corona de laurel sobre los pies de la estatua.

«Con este homenaje, queremos recordar el legado de uno de los actores más influyentes de la historia del teatro, que se ha ido perdiendo con el paso de los años», recordó Jaime Cros, exmiembro del grupo teatral Isidoro Máiquez.

Cros, también quiso referirse a la localización de la estatua situado actualmente en uno de los laterales de la plaza. «Desearíamos que Isidoro Máiquez volviese a recuperar su lugar en el centro de la Glorieta, porque ha quedado un tanto apartada desde la rehabilitación que el Ayuntamiento hizo de la plaza», señaló Cros, que aseguró que desde Cultura siempre se ha prestado asistencia para permitir que este evento se pueda celebrar. Así, emplazó a todos los asistentes al próximo año, ya que se cumple el 200 aniversario del fallecimiento del actor cartagenero.