Cartagena se vuelca con la Piedad

Cartagena se vistió ayer de color morado para abrazar a la Caridad Chica, la Virgen de la Piedad, que recorrió las calles del centro de la ciudad rodeada de fe y devoción. La talla de José Capuz lucía un nuevo paño, con motivo del cincuenta aniversario de la Virgen.

Miles de promesas siguieron a la Piedad por la calle, algunas de ellas descalzas y en las varas del trono de la Virgen, también algunos portapasos llevaban el rostro cubierto. La brisa del mar acompañó a la Piedad en su recorrido hasta la basílica de la Caridad, donde le aguardaba su hermana mayor, y una vez allí la agrupación de portapasos ofreció como manda la tradición un ramo de rosas negras a la Patrona.

Este gesto conmemora un episodio de la Guerra Civil, cuando un grupo de prostitutas evitó la destrucción de la imagen de La Caridad. Una de ellas, Caridad ´La Negra´ ofreció después un ramo de rosas negras a la Patrona durante la Semana Santa. A finales de lo años ochenta los portapasos recuperaron esta tradición.

Además, durante su recorrido la Virgen fue agasajada con varias saetas, con motivo de la celebración del concurso nacional que organiza la agrupación de portapasos de La Piedad cada año.

Miles de personas siguieron con la mirada pérdida el rostro de la Virgen y, muchos de ellos, aprovecharon para hacerle su promesa. ¡Viva la Virgen guapa!