Hace poco más de tres años que Mariano y Dori, un matrimonio que vivió en nuestra ciudad, decidieron crear una ONG con el nombre de su hijo Pablo que había fallecido hacía poco víctima de un cáncer. Desde el primer momento, muchos fueron los cartageneros que se movilizaron para apoyar a la APU (Asociación Pablo Ugarte), algunos muy cercanos a mí, por eso les sigo la pista desde el inicio y por eso, me emocionó ver cómo tan solo tres años después, este viernes, consiguieron reunir a más de 450 personas en la cena benéfica anual.
Azafatas dando la bienvenida a todos, photocall, un salón enorme lleno hasta la bandera con casi 50 mesas, stand de camisetas, centenares de regalos donados por empresas y particulares expuestos para la rifa llegar a la cena ponía los pelos de punta al ver hecho realidad el esfuerzo de tantas personas que durante semanas han dedicado su tiempo libre de manera desinteresada para que todo saliera lo mejor posible esa noche.
«Es sorprendente ver a tantos voluntarios en un acto así. Hay alrededor de 20 chicos y chicas que podrían estar por ahí con sus amigos y están un viernes por la noche aquí, ayudando a que todo salga bien e implicados en el evento», reflexionaba David Martínez casi nada más llegar y no fue el único en fijarse en ese detalle. Adolescentes de voluntarios haciendo de azafatos, parejas jóvenes, grandes grupos de amigos, matrimonios que han celebrado ya las bodas de plata e incluso las de oro, la solidaridad no entiende de edad y el viernes lo comprobamos.
Todo el mundo llegaba con una enorme sonrisa dispuesto a celebrar los logros de la asociación en este tiempo, que no son pocos, y de poner esa noche su particular granito de arena a la causa para seguir defendiendo con hechos uno de los lemas de la asociación: «hace más un poco de muchos que un mucho de pocos».
La gala es el encuentro anual de los socios, pero también sirve para que otros muchos conozcan la asociación por primera vez o un poco más de cerca y a ser posible, se animen a formar parte de ella. Francisco Hidalgo, por ejemplo, acudió con el equipo de la bodega Casa Rojo, «nos ha sorprendido muchísimo la cantidad de gente que ha asistido y el buen ambiente que ha habido en todo momento. Nos ha encantado participar porque la asociación demuestra que tiene las cosas claras y que lucha por ellas».
Elena Campillo, otra de las asistentes, también destacaba el ambiente de solidaridad y la gran organización de la noche «sobre todo teniendo en cuenta que la asociación lo hace todo a coste cero, es agradable sentir la solidaridad de la gente». Elena destacaba este aspecto porque la APU es la asociación que más dinero destina de España a la investigación del cáncer infantil y es la única que no tiene ningún gasto en sus cuentas. Según los últimos datos que daba el presidente, los 21.000 euros que consiguen por ahora recaudar al mes, van íntegros a los 8 equipos de investigación que tienen activos en hospitales de Murcia, Madrid, Barcelona y Valencia.
Viendo el éxito de la convocatoria, Mariano Ugarte reconocía que la APU de Cartagena siempre le sorprende y que si siguen creciendo a ese ritmo «el sueño de cerrar la asociación porque ya no hace falta está más cerca». Ojalá tenga razón.
NOTA: Si queréis colaborar podéis haceros socios eligiendo vosotros la cuota o pedir una cerveza solidaria en la cervecería Yellow Submarine (plaza del Ayuntamiento) que cada mes tendrá un barril especial cuyos beneficios irán a la Asociación.
