Cuándo todavía no se conocía la intención del Museo Naval de acoger en sus salas el submarino Isaac Peral, un grupo de técnicos municipales, encabezados por el director de Cultura del Ayuntamiento, Isidro Pérez, analizaron el estado del sumergible y valoraron en 110.000 euros el coste de su rehabilitación.

Este estudio se llevó a cabo en septiembre y en él se comprobó que hay varias zonas del casco en las que apenas queda metal debido a la acción del óxido. «Hay áreas muy grandes donde será necesario llevar a cabo injertos de metal», precisa Isidro Pérez.

El Ayuntamiento no podía hacerse cargo de los costes debido a la crisis económica, «pero si estábamos preocupados por el submarino y por eso se pidió a Isidro que hiciera este informe», explicó a esta redacción el portavoz del equipo de Gobierno, Francisco Espejo.

En el estudio llevado a cabo por los técnicos municipales se corrobora que el metal se ha oxidado y que ha permitido su consistencia. «Será necesario quitar el óxido mediante chorreo de micropartículas o hidrólosis. Se estima que sí hay grandes daños en el caso pero hay que verlo una vez que se retire el óxido», señala Isidro Pérez.

El tiempo necesario para ejecutar las obras de restauración es de cuatro ó cinco meses, según el director de Cultura del Ayuntamiento. «No es un cuadro. Es algo más sencillo de tratar. Sólo hay que restaurar el metal porque la pintura no es original», afirma Isidro Pérez.