En el origen de una Moción que defendí el lunes pasado en la Asamblea Regional, sobre los derechos de los discapacitados, está la historia de Carmen. Esta mujer tuvo un ictus en el año 2006 mientras conducía su coche, lo que le provocó un accidente de tráfico que le dejó secuelas corporales muy graves. Desde entonces está discapacitada aunque, gracias a una fuerza anímica trabajada concienzudamente, ha conseguido importantes progresos en la conquista de una cada vez mayor movilidad.

«Lo primero fue hacer el duelo de despedir a la mujer que fui y dar la bienvenida a la mujer que soy ahora», nos decía a tres parlamentarios de Podemos que la escuchábamos emocionados en una calurosa mañana de domingo en la cafetería de la Estación del Carmen. En un principio Carmen se movía en silla de ruedas y en los últimos años en scooter. Este último medio de transporte es muy valorado por las personas con discapacidad por la autonomía que confiere. Pero Carmen vive en Beniel y dos días a la semana tiene que viajar a Murcia a sus sesiones de neuro-rehabilitación. Estas sesiones son cruciales en su situación pues le han permitido hacer enormes progresos en su vida. Para ella lo ideal es poder viajar en tren, pues la estación de Beniel está relativamente cerca de su casa y en diez minutos se pondría en Murcia. Pero resulta que ninguno de los trenes de cercanías que hacen el trayecto a Murcia dispone de un acceso adaptado a personas discapacitadas. El domingo pasado varios parlamentarios de Podemos la acompañamos a la estación de Beniel. Cuando llegó el tren de cercanías de las 10 de la mañana y se abrieron las puertas para que accedieran los pasajeros, tres escalones aparecían desplegados ante los ojos de Carmen como un enorme muro imposible de franquear. Los trenes de la red regional de cercanías excluyen a las personas con discapacidad.

Carmen ha descubierto que el tren de las 10,30 tiene rampa de acceso. No es un Cercanías, es un Regional que viene de Valencia y por tanto, pasa con menor frecuencia horaria. Pero al menos tiene rampa de acceso. Cuando se abrieron las puertas de este Regional, Carmen se puso en pie con mucha dificultad y con ayuda del revisor, logró subir y que también entrara su scooter. Nos cuenta que esta acogida por parte de un revisor o de un conductor de autobús no es siempre así, pues existe un vacío legal sobre estos medios de transporte que hace que a menudo los revisores de trenes o los conductores de autobús se nieguen a aceptar a la persona discapacitada cuando no va con un acompañante que la ayude.

Este relato, aunque singularizado en el caso de Carmen, sintetiza el caso de muchas otras vidas de personas con discapacidad y muestra que, para hacer efectivo el acceso de las personas con discapacidad a los servicios ferroviarios, son necesarias dos cuestiones que planteaba en la mencionada Moción: Por un lado, cumplir con el Real Decreto de 2013 que establece dos años para realizar los estudios integrales sobre la accesibilidad de discapacitados a medios de transporte. No se ha hecho ese estudio en la red ferroviaria de cercanías en la Región de Murcia. Por otro lado, es necesario la Reforma del Real Decreto 1544/2007 (por el que se regulan las condiciones básicas de accesibilidad y no discriminación para el acceso y utilización de los medios de transporte por parte de personas con discapacidad) para incluir la obligación de aceptar en cualquier espacio o medio de transporte a las personas usuarias de herramientas de movilidad tipo scooters. Esta demanda del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) ha sido planteada recientemente al Ministerio de Fomento. En la normativa vigente de accesibilidad al transporte no se mencionan expresamente elementos de movilidad diferentes a las sillas de ruedas, como las scooters, lo cual deja fuera del amparo jurídico en la actualidad a las scooters para ser admitidas en los medios de transporte sin exclusiones ni restricciones.

Hubo unanimidad en la aprobación de la Moción por parte de los cuatro grupos parlamentarios. Vaya por Carmen para que en su nueva vida conquiste más justicia y acogida.