Un 22,7% menos, el mayor descenso en inversiones de todas las comunidades autónomas. En un año en que el Gobierno plantea unos presupuestos electoralistas y se pone extraordinariamente optimista diciendo que la crisis ha acabado, la Región de Murcia ve cómo ese mismo Gobierno demuestra que la tiene a la cola de sus prioridades. Se olvida del Corredor Mediterráneo y dota cantidades totalmente insuficientes para el AVE y la variante de Camarillas, la regeneración de la Bahía de Portmán, inversiones medioambientales, fabricación de motores en Navantia y otras inversiones que el PSOE sí ha contemplado en sus enmiendas. De hecho, las 7 enmiendas del PP a sus propios presupuestos suman 12,8 millones mientras que las 27 enmiendas del PSOE suman 390 millones, 30 veces más, una diferencia sustancial que demuestra quién apuesta de verdad por esta Región. El PSOE plantea dotar al Plan para el desarrollo integral de la comarca de Lorca con 150 millones, 25 para el soterramiento del AVE en Murcia, 25 para la adecuación de la estación de Cartagena al AVE, 20 para el Corredor Mediterráneo, 20 para la regeneración de la Bahía de Portmán, 15 para la fabricación de motores para los buques de acción marítima en Navantia Cartagena, 15 para la rehabilitación de las baterías de costa en Cartagena, 60 para distintas infraestructuras hidráulicas, 25 para planes de reindustrialización y polígonos industriales y otras de menor cuantía. En definitiva, se recogen muchas de las infraestructuras que demanda y necesita nuestra región.

No obstante, algún lector podrá decir que para el PSOE es muy fácil plantear todo esto, pues no está gobernando y también podrá pensar que de dónde se va a sacar el dinero. Pues bien, hay propuestas en ese sentido que no consisten ni en recortarlo de otros sitios (como plantea el PP en sus enmiendas) ni en incrementar el endeudamiento. El PSOE ha realizado un planteamiento a la vez realista y progresista. Los fondos para cubrir estas enmiendas y el resto de las 1.601 presentadas se obtendrán de incrementos de impuestos y de un incremento de la recaudación logrado con un aumento de la plantilla de la Agencia Tributaria. Eso sí, los impuestos que subirían serían para las grandes empresas, para las grandes rentas y para los grandes patrimonios. Se plantea un incremento en el IRPF para los tramos más altos, la creación de un nuevo impuesto para las grandes fortunas y la fijación en un mínimo del 15% de los beneficios contables del impuesto de sociedades. Es decir, luchar decididamente contra la economía sumergida dotando de medios a la organización responsable de ello y hacer que aquellos que durante la crisis, mientras el 95% de la población veía reducidos sus ingresos y su parte en el reparto de la riqueza, han seguido incrementando los suyos y generando una mayor desigualdad social.

Los últimos presupuestos de un gobierno socialista en España, ya en plena crisis mundial, asignaron más de 526 millones a nuestra Región, casi 200 millones más de los que asigna el PP para 2016, a pesar de que el Gobierno nos quiere hacer creer que ya no hay problemas económicos. Si es así, ¿por qué se reducen la inversiones? ¿Por qué en nuestra Región más que en ninguna otra comunidad autónoma? ¿Por lo mismo que han recortado 5 hectómetros cúbicos en el último trasvase aprobado? ¿Por lo mucho que Pedro Antonio Sánchez influye en las decisiones de Rajoy?

En definitiva, se puede hacer más por la Región de Murcia como se puede hacer más por el resto de España. Actualmente, la crisis sigue estando ahí para millones de familias y seguir empeñándose en el austericidio es un error económico y un crimen social. Por ello, hay que aumentar los ingresos públicos obteniéndolos de los que no han pagado la crisis y hay que estimular la economía para salir a marchas forzadas de esta situación.