La Navidad suele ser época de fiesta y la última noche del año que se despide siempre es motivo de celebración. Pero no será en casa de María del Mar y Agustín. Este joven matrimonio (23 y 25 años) no tiene nada que celebrar pues, tras varios años en el paro y sin ningún tipo de ayuda económica, está a punto de perder la casa donde viven con sus dos hijos, de ocho años y nueve meses de edad.

Hace dos años que María del Mar y Agustín alquilaron una vivienda en Puente Tocinos, pero son ya dos meses los que no pagan el alquiler y el dueño de la casa necesita también ese dinero para poder vivir. «Comprendemos perfectamente al dueño de la casa, es algo normal, pero no tenemos cómo pagarle», asegura a esta Redacción María del Mar, quien antes de quedarse en el paro trabajó limpiando casas y en un asadero de pollos, pero «sin cotizar». Su marido ha sido peón de albañil y tiene formación en jardinería, pero desde hace cinco años no encuentra ningún puesto de trabajo.

La pareja logra subsistir gracias a la ayuda de Cáritas, «que nos da comida y pañales para el crío», explica la joven madre, quien destaca que actualmente no reciben ninguna ayuda económica y que el único dinero con el que cuentan es con «lo que logramos vender casa por casa», pues ambos intentar reunir algo de dinero con la venta ambulante. Asimismo, la madre de Agustín aporta algo de ayuda para comprar comida, porque «ella no tiene para dejarnos para una casa».

Si nada ni nadie lo remedia, el próximo viernes, 1 de enero, esta familia tendrá que dejar la casa de Puente Tocinos, pues el dueño les ha dado de plazo hasta el último día de 2015.

El matrimonio lo ha intentado todo. Hace un año solicitó una vivienda social, pero «aún están con los papeleos», asegura María del Mar, quien se lamenta de que no le hayan concedido la ayuda para el alquiler al no pertenecer «al colectivo preferente», es decir, al no ser una mujer maltratada, no tener hijos discapacitados y vivir con su pareja.

Esta joven madre afirma encontrarse «mal» y por ello ha decidido contar su historia, para lograr que «alguien la conozca y nos quiera ayudar, ya sea con un trabajo o con ayuda para una casa». Así, explica que cualquier persona interesada en ayudarles puede dirigirse a la Junta Municipal de Puente Tocinos, donde «nos conocen y saben de nuestro caso».