Los testigos de Jehová de la Región no olvidaron a sus hermanos de Lorca, quien sufrieron dos terremotos el pasado 11 de mayo que destrozaron prácticamente la ciudad. El recuerdo a las víctimas de los seísmos -la madre de uno de los fallecidos pertenece a esta confesión- estuvo presente en la Asamblea de Distrito. Uno lorquino subió al escenario y explicó a los 4.850 asistentes las muestras de solidaridad que hermanos de todo el mundo habían tenido con los testigos de Jehová que se habían visto afectados por la desgracia.

El mismo Salón del Reino que los testigos de Jehová tienen en la ciudad del Sol sufrió daños con los terremotos, pero fueron los propios miembros de la religión quienes repararon el edificio.

Uno de los 53 bautizados en la mañana de ayer fue José David, quien recuerda que los dos seísmos le sorprendieron predicando por las calles de su ciudad.