«Su conducta será enjuiciada por los tribunales y, estos, calificarán en forma legal los presuntos delitos en los que ha incurrido». Así de tajante se mostraba en un comunicado el Patronato de la Fundación Hospital de la Real Piedad de Cehegín sobre su exsecertario con respecto al supuesto desvío de unos 600.000 euros. El Patronato «rechaza todas las declaraciones efectuadas por J.L.Z.G, secretario, no patrono, en el intento de mostrarse como victimario del Patronato, cuando, por el contrario ha abusado, ampliamente y más, de la confianza que en él se depositó durante muchos años». Para los responsables de la Fundación «ha infringido de esta manera, gravísimamente, el deber de lealtad que le incumbía y quebrantando la fe a la que estaba obligado como secretario», una situación en la que matizan que «tampoco le importó, al parecer y presuntamente, poner en situación muy peligrosa cincuenta puestos de trabajo de sus propios compañeros».

Por su parte, el secretario del hospital aseguraba en un escrito que «la deuda no se ha generado como consecuencia de sus funciones laborales, sino que es consecuencia de los graves problemas de liquidez que está atravesando la Fundación Hospital Real Piedad de Cehegín».

Asimismo explica que nunca ha ostentado el cargo de administrador de dicho hospital, siendo «el órgano de administración de dicha fundación el Patronato, del que no es patrono». La Fundación lanza un mensaje de tranquilidad para el personal que trabaja en el centro asistencial, explicando que «pueden estar en la seguridad de que no van a perder sus puestos de trabajo y demás derechos».